Las pérdidas económicas aumentan en los países en vías de desarrollo, ya que la ausencia de una vacunación generalizada contra el COVID-19 mantiene alejados a los turistas.
Según un informe de la UNCTAD la caída del turismo internacional debido a la pandemia del coronavirus podría causar una pérdida de más de USD 4 billones en el PIB global durante los años 2020 y 2021. La pérdida estimada se debe al impacto directo de la pandemia en el turismo y a su efecto dominó en otros sectores estrechamente relacionados con él.
El informe, publicado conjuntamente con la Organización Mundial del Turismo (OMT) de las Naciones Unidas, afirma que el turismo internacional y sus sectores altamente vinculados sufrieron una pérdida estimada de USD 2.4 billones en el 2020, tras una fuerte caída en las visitas turísticas internacionales.
Este año puede producirse una pérdida similar, advierte el informe, y señala que la recuperación del sector turístico dependerá en gran medida de la aplicación global de las vacuna del COVID-19. “El mundo necesita un esfuerzo de vacunación global que proteja a los trabajadores, mitigue los efectos sociales adversos y se tomen decisiones estratégicas en relación con el turismo, teniendo en cuenta los posibles cambios estructurales”, dijo la Secretaria General interina de la UNCTAD, Isabelle Durant.
El Secretario General de la OMT, Zurab Pololikashvili, sostuvo lo siguiente: “El turismo es un salvavidas para millones de personas, y avanzar en la vacunación para proteger a las comunidades y apoyar la reanudación segura del turismo es fundamental para la recuperación de puestos de trabajo y la generación de recursos muy necesarios, especialmente en los países en desarrollo, muchos de los cuales dependen en gran medida del turismo internacional.”
Tourists are seen at the Juan Santa Maria airport in Alajuela, Costa Rica, on May 28, 2021. - Costa Rica is experiencing its most critical moment since the Covid-19 pandemic breakout, in March 2020, but maintains an encouraging outlook for its economic reactivation. (Photo by Ezequiel BECERRA / AFP)
Desigualdad en el acceso a las vacunas. Según el informe, la vacunación contra la COVID-19 es más pronunciada en algunos países que en otros, por lo que las pérdidas económicas derivadas del turismo se reducen en la mayoría de los países desarrollados, pero se agravan en los países en desarrollo, donde la ausencia de vacunas está manteniendo alejados a los turistas.
Las tasas de vacunación contra el COVID-19 son desiguales entre los países, oscilando entre menos del 1% de la población en algunos países y más del 60% en otros. En este sentido, el despliegue asimétrico de las vacunas magnifica el impacto económico en los países en desarrollo, ya que estos podrían representar hasta el 60% de las pérdidas del PIB mundial.
El sector espera que la recuperación sea más rápidamente en los países con altas tasas de vacunación, como Francia, Alemania, Suiza, Reino Unido y Estados Unidos. Pero los expertos no esperan volver a los niveles de afluencia turística internacionales previos a la pandemia hasta 2023 o incluso después, según la OMT.
Los principales obstáculos son las restricciones a los viajes, la lentitud en la contención del virus, la poca confianza de las personas para viajar y un entorno económico deficiente.
En cuanto al repunte del turismo internacional en el segundo semestre de este año, pero el informe de la UNCTAD sigue mostrando una pérdida de entre 1.7 y 2.4 billones de dólares en el año 2021, con respecto a los niveles del año 2019.
El informe evalúa los impactos económicos de tres posibles escenarios -todos ellos reflejan la reducción de las visitas internacionales- en el sector turístico en el 2021.
Pérdidas de empleo en todos los países. La reducción del turismo provoca un aumento promedio del 5.5% del desempleo de la mano de obra no cualificada, con una gran variación del 0% al 15%, según la importancia del turismo para la economía. La mano de obra representa alrededor del 30% del gasto de los servicios turísticos, tanto en las economías desarrolladas como en las que están en vías de desarrollo. El sector emplea a muchas mujeres y jóvenes, quienes tienen relativamente pocas barreras de entrada a este sector.
Las pérdidas son peores de lo que se esperaba. En julio del año pasado, la UNCTAD estimó que una paralización de entre cuatro y doce meses del turismo internacional costaría a la economía mundial entre USD 1.2 y 3.3 billones, incluidos los costes indirectos.
Sin embargo, las pérdidas son peores de lo que se esperaba, ya que incluso el peor escenario previsto por la UNCTAD el año pasado ha resultado ser optimista, ya que los viajes internacionales siguen siendo bajos aún después de más de 15 meses desde el inicio de la pandemia.
Según la OMT, las llegadas de turistas internacionales se redujeron en unos 1.000 millones de viajes, o un 74%, entre enero y diciembre de 2020. Si se excluyen los meses de enero y febrero del 2020, anteriores a la pandemia, la caída de las llegadas asciende al 84%.