La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) es una herramienta que contribuye a fomentar el impacto positivo de las empresas en la sociedad, actuando sobre los derechos sociales, laborales, el medioambiente y, en definitiva, sobre los Derechos Humanos.
Las nuevas tendencias de consumo, regulaciones estatales y condición socioambiental ponen en el foco la importancia de la Responsabilidad Social Empresarial en el distintos sectores claves de la economía local y mundial.
Realidad que debe verse reflejada en el gobierno corporativo de toda empresa y/o institución. ¿ Qué ventajas ofrece la implementación correcta de políticas de RSE? Elsa Del Castillo, profesora del Pacífico Business School explica cómo un buen gobierno corporativo puede fomentarla.
1. Mayor relacionamiento. A diferencia del antiguo modelo empresarial-cuya única meta era generar ganancias- el buen gobierno corporativo responde a las demandas de diferentes grupos de interés, como la sociedad y el medio ambiente.
2. Es más transparente. El modelo de gestión permite construir relaciones de confianza que hacen que la demanda se fortaleza y las oportunidades para crecer sean mayores. También reduce riesgos, pues evita malas prácticas.
3. Genera prestigio. Las personas talentosas quieren trabajar en las empresas responsables y los clientes son cada vez más conscientes de qué valores defienden la empresa que está detrás el producto que compran.
4. Evita conflictos. A diferencia de las empresas que no se preocupan por generar un balance de impacto sociales y ambientales positivos, generando paros en la operación, y en consecuencia, pérdidas.
5. ¿ Modelo extendido? La ventaja de este modelo aun no han sido muy difundidas en los países latinoamericanos. Las empresas que más han avanzado al respecto son las que cotizan en el mercado de valores, donde la reputación es clave.
En este contexto, la consultora Delloite cita algunos aspectos claves para fomentar la Responsabilidad Social Empresarial. Una empresa socialmente responsable debe fundamentar sus valores y compromisos en las siguientes premisas:
  • Independencia y rigor en su gestión y gobierno.
  • Responsabilidad en todas las operaciones y transparencia hacia sus grupos de interés.
  • Alineamiento de sus objetivos con las demandas de la sociedad.
  • Compromiso con la innovación y la mejora continua en sus actuaciones.
  • Respeto al medioambiente y respuesta a las inquietudes del entorno social.
  • Diálogo y equidad en el establecimiento de las relaciones laborales.
  • Comunicación constante para generar confianza en la sociedad.
  • Compromiso con los clientes mejorando la relación y atendiendo sus demandas.