El conferencista español define que el objetivo en la vida no es estar siempre feliz, y que también hay que permitirse estar triste o frustrado, pero no quedarse ahí.
Tras su visita a Paraguay este año, el reconocido conferencista y forma­dor español de Mentes Expertas, Víctor Küppers, compartió con FOCO Business ideas poderosas sobre cómo cultivar una buena actitud, gestionar emociones difíciles y mantener la motivación en contextos personales, profesionales y empresariales.
Señala que, el rendimiento de las per­sonas dentro de una empresa depende de sus conocimientos y de la experien­cia, pero, sobre todo, de la actitud. Las organizaciones exitosas no solo deben enfocarse en capacitar técnicamente a sus equipos, sino también en trabajar la actitud, explica.
Ese motor invisible que impulsa a dar lo mejor de uno mismo, de ser crea­tivo, innovador y marcar la diferencia. “Uno de los grandes retos de las empre­sas es cómo trabajar y mejorar la actitud de las personas.”
Y ante la consulta de cómo encarar los desafíos cotidianos sin perder la calma, incluso en medio de tristezas, el experto indicó que el objetivo en la vida no es estar siempre feliz, de hecho, eso es imposible, dijo.
Aunque tampoco se trata de negar las emociones negativas, sino de aprender a gestionarlas. La clave está en entender que los momentos difíciles son túneles, no pozos sin salida. “Hay que permitirse estar triste o frustrado, pero no quedarse ahí. De los túneles se sale cuando uno sigue caminando”, instó.
Sobre cómo aplicar esto en el campo de los emprendedores, que, por lo gene­ral, suelen comenzar con entusiasmo, pero luego la curva baja, afirmó que la motivación ayuda a arrancar, pero que la voluntad y la disciplina son las que conducen hasta el final.
Víctor destaca que el entusiasmo ini­cial es solo el punto de partida, y que lo que verdaderamente sostiene un proyec­to en el tiempo es la constancia. En este punto, aseveró que es importante mante­ner una actitud positiva, sobre todo en los negocios, ya que es la que empuja, mientras que la negativa te paraliza.