Algunas de estas tecnologías no serán realidad hasta dentro de unos años. Otras corresponden a avances científicos y tecnológicos que se están aplicando ya para resolver grandes problemas de la humanidad.
Estas tecnologías emergentes se recogen en el último informe de tendencias publicado en MIT Technology Review, una revista que pertenece al Instituto de Tecnología de Massachusetts. Estas son las que corresponden al 2023:
Inteligencia Artificial generativa de imágenes
La Inteligencia Artificial generativa está de moda gracias a soluciones como ChatGTP, para la elaboración de textos, y DALL-E, un modelo de lenguaje capaz de seguir instrucciones para convertir texto en imagen. El origen de estos desarrollos hay que buscarlos en OpenAI , compañía fundada inicialmente en 2015 por Elon Musk y Sam Altman para el desarrollo de inteligencia artificial ‘buena’ para la humanidad.
No obstante, la publicación de MIT señala como la novedad más importante Stable Diffusion, un modelo de conversión de texto en imagen de código abierto y gratuito, lanzado por la empresa británica Stability AI en agosto. Stable Diffusion, acusada ahora de piratería, “no solo podía producir algunas de las imágenes más asombrosas hasta la fecha, sino que estaba diseñado para funcionar en un (buen) ordenador doméstico”.
Asimismo, esta tecnología de texto a imagen ya ha avanzado hasta convertir texto en vídeo. En este mercado surgen empresas de nuevas creación como Aug X Labs, una startup de tecnología y publicación de vídeo basada en IA. Su producto ayuda a cualquiera a convertir sus palabras en vídeos atractivos, dinámicos y creativos en cuestión de minutos. “Democratizamos la creación de vídeos transformando las palabras en contenidos de vídeo atractivos, relevantes y cautivadores”, afirman.
CRISPR: la edición de genes contra el colesterol alto
Los orígenes de CRISPR hay que situarlos en España, concretamente en la Universidad de Alicante donde el científico Francisco Martínez Mojica practica, con su equipo, investigación básica. Algunos definen CRISPR como el descubrimiento biotecnológico del siglo y otros como la tecnología disruptiva que lo cambiará todo. El potencial es bestial dada su capacidad para editar el genoma de los seres vivos y corregir lo defectuoso, todo aquello que va mal, incluyendo enfermedades de cura insospechadas hasta el momento.
Desde el descubrimiento de CRISPR, numerosos laboratorios buscan nuevas aplicaciones clínicas basadas en esta herramienta de edición genética con el propósito de hallar tratamientos a enfermedades comunes. En esta línea. Verve Therapeutics, Beam Therapeutics, Prime Medicine o el Instituto Broad investigan su aplicación que reduzca el colesterol alto.
Mientras que los primeros tratamientos experimentales con CRISPR se centraron en trastornos genéticos raros, este tratamiento contra el colesterol tiene un número de beneficiarios potenciales mucho mayor. Según aclara en la publicación MIT Technology Review, el tratamiento para reducir el colesterol, desarrollado por Verve Therapeutics, se basa en una forma de edición genética denominada «edición de bases» o «CRISPR 2.0». Se trata de un enfoque más selectivo: en lugar de limitarse a realizar cortes para desactivar genes específicos, los científicos pueden cambiar una base de ADN por otra.
El diseño de chip que lo cambia todo
Los diseños de chips informáticos son caros y difíciles de licenciar. Eso está a punto de cambiar gracias al popular estándar abierto conocido como RISC-V. Ahora, un estándar abierto conocido como RISC-V suma méritos para cambiar la forma en que las empresas crean chips informáticos.
Las empresas de chips como Intel y Arm han mantenido durante largo tiempo la propiedad de sus diseños. Los clientes compraban chips ya listos, que podían tener funciones irrelevantes para su producto, o pagaban más por un diseño personalizado. Como RISC-V es un estándar abierto, cualquiera puede utilizarlo para diseñar un chip, sin coste alguno.
RISC-V especifica normas de diseño para el conjunto de instrucciones de un chip informático. El conjunto de instrucciones describe las operaciones básicas que puede realizar un chip para cambiar los valores que representan sus transistores como, por ejemplo, cómo sumar dos números. El diseño más sencillo de RISC-V solo tiene 47 instrucciones. Sin embargo, RISC-V también ofrece otras normas de diseño para las empresas que buscan chips con capacidades más complejas.
Unos 3.100 miembros de todo el mundo, entre empresas e instituciones académicas, colaboran ahora a través de la organización sin ánimo de lucro RISC-V International para establecer y desarrollar estas normas. En febrero de 2022, Intel anunció un fondo de 1.000 millones de dólares que, en parte, apoyará a las empresas que construyan chips RISC-V.
Los chips RISC-V ya han empezado a utilizarse en auriculares, discos duros y procesadores de inteligencia artificial, con 10.000 millones de núcleos ya distribuidos. Las empresas también trabajan en diseños RISC-V para emplearlos en centros de datos o naves espaciales. Sus partidarios acérrimos son contundentes sobre RISC-V y predicen que en unos años estos chips estarán en todas partes.
El inevitable vehículo eléctrico
Los vehículos eléctricos (VE) están transformando la industria automovilística. En los últimos años, las cifras de ventas se están disparando. La Agencia Internacional de la Energía preveía que en 2022, los coches y furgones sin emisiones iban a representar el 13% de las ventas mundiales de automóviles nuevos, frente al 4% de los dos años anteriores. Estas cifras van camino de suponer el 30% de las ventas a finales de esta década.
Una serie de factores han hecho que estos vehículos pasen de ser una opción de nicho a saltar al mercado de masas. En primer lugar, los Gobiernos han ido promulgado políticas que limitan a los fabricantes a la vez que incentivan su consumo.
El Hongguang Mini, un pequeño coche que cuesta alrededor de 4.600 euros) se ha convertido en el vehículo eléctrico más vendido en todo el mundo, reforzando así el dominio de China como mayor fabricante de vehículos eléctricos a nivel internacional.
Asimismo, la creciente gama de vehículos de dos y tres ruedas de Hero Electric, Ather y otras compañías ha contribuido a triplicar las ventas de los VE en India en el último año.
Telescopio Espacial James Webbel Universo en otra dimensión
Lanzado en diciembre de 2021 después de décadas de investigación, el Telescopio Espacial James Webb (JWST, por sus siglas en inglés) de la NASA, dotado con 10.000 millones de dólares y fruto de la colaboración entre EE UU, Europa y Canadá, es el mayor telescopio jamás enviado al espacio y unas 100 veces más potente que su predecesor, el Telescopio Espacial Hubble.
Está diseñado específicamente para detectar la radiación infrarroja, algo que permite atravesar el polvo cósmico y retroceder en el tiempo hasta la época en la que se formaron las primeras estrellas y galaxias del universo. El JWST está hecho a medida para este tipo de viaje astronómico en el tiempo.
Los astrónomos esperan que el JWST les permita averiguar cómo se formaron las primeras galaxias del universo tras el Big Bang. Igualmente, el ingenio podría proporcionar una visión de los planetas de otros sistemas solares, permitiéndonos descubrir de qué están formadas sus atmósferas.
Desde que comenzó su misión en el espacio en 2022, el telescopio no para de sorprender con imágenes del Universo nunca antes vistas. Los nuevos descubrimientos llueven casi todos los días y lo harán durante toda la vida útil del telescopio, estimada en más de 20 años.
Nuevas formas de reciclaje de baterías
Se prevé que la demanda de baterías crezca exponencialmente durante décadas. El reciclado por sí solo no bastará para satisfacerla y estos nuevos procesos de reciclado no son perfectos. Aun así, las fábricas de reciclaje de baterías crearán un suministro de materiales que el mundo necesita para cumplir sus objetivos climáticos.
En la actualidad, las instalaciones de reciclado pueden recuperar casi todo el cobalto y el níquel y más del 80% del litio de las pilas usadas y de la chatarra sobrante de la producción de baterías, y las compañías de reciclaje prevén revender esos metales a un precio casi competitivo comparado con el de los materiales extraídos. A menudo también se recuperan aluminio, cobre y grafito.
Los metales valiosos recuperados de viejos ordenadores portátiles, taladros eléctricos corroídos y vehículos eléctricos podrían servir para nutrir de energía a los coches del mañana, gracias a los avances en reciclaje que permiten convertir viejas baterías en nuevas.
Los antiguos métodos de tratamiento de las pilas usadas no conseguían recuperar de forma fiable una cantidad suficiente de estos metales para que el reciclado resultara rentable. No obstante, los nuevos métodos han cambiado esta situación y permiten a los recicladores disolver los metales de forma más eficaz y separarlos de los residuos de las pilas.