Las pequeñas y medianas empresas de ALC están preparadas para expandirse más allá de sus fronteras, pero enfrentan costos desproporcionados, demoras y falta de visibilidad en los pagos internacionales.
Las pymes (pequeñas y medianas empresas) representan el 98 % del tejido empresarial y el 60 % del empleo en América Latina y el Caribe- ALC, las cuales tienen capacidad para internacionalizarse, aunque enfrentan barreras transfronterizas como costos desproporcionados, demoras y falta de visibilidad en los pagos externos.
Es lo que revela un nuevo estudio de Mastercard titulado “Pequeñas empresas, grandes oportunidades: Liberando el potencial de las PYMES en el espacio transfronterizo de América Latina”, desarrollado en colaboración con Payments and Commerce Market Intelligence (PCMI) y K2.
La investigación revela la necesidad de un rediseño estructural para impulsar la inclusión y la competitividad global de las pymes, ya que el sistema actual de pagos internacionales, está pensado para grandes corporaciones, y no satisface las necesidades de las pequeñas y medianas empresas.
Devela que 3 de cada 5 pymes en la región ya trabajan con proveedores internacionales, y en mercados como México y Brasil, el 75 % planea ampliar sus alianzas globales incluso. Pero la problemática radica en que enfrentan comisiones elevadas, conversiones poco competitivas y demoras significativas.
“En Brasil, el 80 % de los pagos tarda más de 4 días, y 1 de cada 5 más de 10 días. Enviar solo USD 250 puede implicar comisiones promedio del 23,3 %, alcanzando hasta el 30 % dependiendo del país de destino”, explica el reporte.
La problemática radica en que enfrentan comisiones elevadas, conversiones poco competitivas y demoras significativas. Foto: Ilustrativa
La investigación explica que estas ineficiencias en los pagos no son solo fricciones, ya que pueden significar rupturas en la cadena de suministro o pérdida de oportunidades clave. El volumen de pagos B2B internacionales en América Latina crece un 12 % al año, el doble del promedio global, aporta el informe.
Asimismo, explica que los bancos conservan el 75 % de estos flujos, pero deben adaptarse para no perder terreno frente a nuevas soluciones tecnológicas que van copando. Ante esto, desde la entidad remarcan una estrategia, la de poner a disposición pagos transfronterizos más modernos parar las pymes.
En este sentido, difunden a Mastercard Move, el portafolio de capacidades de movimiento de dinero de Mastercard, que ofrece una solución a las principales barreras que limitan el crecimiento transfronterizo de las pymes.
Esta plataforma tiene como objetivo transformar la experiencia de pagos internacionales para las pymes con beneficios tangibles como pagos más eficientes en costos, al reducir intermediarios y comisiones ocultas. Aseguran también una transparencia total, con trazabilidad en tiempo real de costos y tiempos de entrega.
Otra de las ventajas son las liquidaciones más rápidas, incluso el mismo día o en tiempo real en más de 150 mercados, una integración digital que permite operar desde sistemas de facturación o apps móviles ya utilizadas por las pymes.
Un aspecto clave, la seguridad y cumplimiento automatizado, con tecnología avanzada y protocolos globales de la entidad que reducen el riesgo, mejoran la confiabilidad (rechazo menor al 2 %) y aseguran un entorno de pago seguro, detallan.