El liderazgo emocional no solo mejora la toma de decisiones, sino que también fomenta equipos fuertes, adaptables y motivados. Desde reflexionar sobre nuestras emociones hasta practicar la gratitud, Nicole Huber, health coach, empresaria y directora de Cumana Centro de Bienestar comparte su enfoque para liderar con empatía, resiliencia, y, sobre todo, promoviendo entornos de trabajo positivos y colaborativos.
1. Para decisiones más claras y estratégicas: Al identificar nuestras emociones y gestionarlas adecuadamente evitamos tomar decisiones desde la impulsividad emocional. Dedica 5 minutos diarios a reflexionar sobre cómo te sientes, qué situaciones detonan rabia, tristeza, miedos y en qué partes del cuerpo. Permítete liberar esas emociones para que no se acumulen en tu sistema nervioso.
2. Crear equipos fuertes, excelentes y duraderos:Practica la empatía. Al empatizar con tu humanidad y tus propias emociones puedes empatizar con las de tu equipo y desde ahí guiar con mayor asertividad. Escucha activamente sin interrumpir validando sus emociones y comparte experiencias tuyas con ese mismo sentir.
3. Promueve la resiliencia emocional ante desafíos: La capacidad de adaptarse al cambio es una competencia innegociable en nuestros días. Como líderes, administrar y promover el manejo del estrés con eficacia reduce el agotamiento y mejora la adaptabilidad del equipo. Sugiero ofrecer capacitaciones en manejo del estrés y sesiones semanales de clases de yoga.
4. Ser un líder que inspira:Camina tu palabra.Si quieres colaboradores excelentes sanos e íntegros empieza por darte a ti mismo el tiempo para potenciar tu bienestar mental, físico, emocional y nutricional.
5. Fomenta la comunicación abierta: Crea espacios donde el plantel pueda expresar ideas y emociones sin temor de manera respetuosa para fortalecer la confianza y coherencia del equipo. Organiza reuniones regulares para compartir pensamientos y emociones.
6. Resiliencia ante fracasos: Reconoce los desafíos del fracaso, la responsabilidad y compromiso de mejora de cada parte. Comparte tus estrategias para manejar emociones en situaciones difíciles. Aborda los fracasos o errores con soluciones claras tomadas en conjunto desde la energía de aprendizaje y no del castigo.
7. Equipo con autoestima alta: La gratitud y el reconocimiento al esfuerzo crea un equipo con alta autoestima, más eficiente, más exitoso y sostenible. Practica la gratitud y reconocimiento de logros y mejoras constantemente contigo mismo y luego con tus colaboradores. No escatimes en reconocerlos y verás los grandes resultados.