La realidad y el potencial de la mujer en la ciencia

Paraguay recordó el Día de la Mujer Paraguaya el pasado 24 de febrero. Además, el 11 de febrero se celebró Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, y el 8 de marzo el mundo conmemora el Día Internacional de la Mujer. Estudios del BID estiman que la eliminación de barreras ocupacionales que enfrentan las mujeres en relación con los hombres como la discriminación salarial, las brechas de acumulación de capital humano, y los efectos de normas sociales sesgadas, generaría ganancias agregadas considerables en los países del Cono Sur que van de 4% a más de 15% del PIB.

¿Cuál es la perspectiva de América Latina y el Caribe y Paraguay en relación con la participación de las mujeres en la Ciencia? Los indicadores parecen ser optimistas, ya que en promedio el 45% de los investigadores de América Latina y el Caribe son mujeres. La participación de las mujeres en ciencia en Paraguay es superior al promedio regional. Además, la diferencia de ingresos entre hombres y mujeres se reduce significativamente en el mundo de las ciencias en Paraguay. En ocupaciones como las de “Profesionales Científicos e Intelectuales” en Paraguay, hombres y mujeres tienden a tener ingresos más parecidos en comparación con otros sectores. Por ejemplo, en trabajos más asociados tradicionalmente con mujeres, como los de servicios y ventas, la brecha salarial es mucho mayor.

Sin embargo, las brechas todavía persisten. En Paraguay, el 40% de las personas que realizan actividades de investigación científica y tienen doctorado en Paraguay son mujeres. Aun así, solo un 26% se presenta a concursos como líder de proyecto y tienden a estar subrepresentadas en los niveles superiores del Programa Nacional de Incentivo a los Investigadores (PRONII). Entre los desafíos que encuentran las mujeres para ascender en sus carreras como investigadoras figura la falta de apoyo financiero, la dificultad para que puedan publicar los resultados de sus investigaciones, o la “tubería con fugas”, que sucede cuando las mujeres inician un recorrido educativo o profesional, pero abandonan por razones personales, cuestiones institucionales y otras formas de discriminación. Otra barrera todavía se encuentra en los estereotipos: las niñas desde temprana edad son impulsadas a creer que no son buenas para ciertas áreas como STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas por sus siglas en inglés).

Desde el BID apoyamos el fortalecimiento de las capacidades en Ciencia, Tecnología e Innovación en el país. En el caso del programa de becas Carlos Antonio López (BECAL), casi 2.000 mujeres fueron becadas para realizar posgrados en el exterior (el 63% de becarios). En general, existe una paridad en las diversas ciencias, excepto en Ingenierías y Tecnología, con una predominancia de varones (21% / 7%). A través del programa PROINNOVA del Consejo Nacional de Ciencias y Tecnología (CONACYT), también se apoya a mujeres con emprendimientos de base tecnológica.