El fabricante italiano de automóviles de lujo Ferrari, que logró un crecimiento récord de dos dígitos en 2022, espera alcanzar resultados igualmente sobresalientes este año, con el objetivo de generar ingresos por 5.700 millones de euros.
La prestigiosa marca entregó el año pasado 13.221 coches en todo el mundo, el 18,5% más, según cifras divulgadas este jueves en un comunicado de prensa.
El beneficio neto subió de un 12,7% hasta los 939 millones de euros, marcando de “nuevo un récord”, según el grupo.
Los ingresos aumentaron un 19,3% hasta los 5.090 millones de euros, en línea con las previsiones.
Se trata de resultados “excepcionales” y que constituyen “la base para un 2023 aún más fuerte, impulsado por la continua alta demanda de nuestros productos en todo el mundo”, aseguró el director ejecutivo del grupo, Benedetto Vigna, en el comunicado.
Las ventas fueron impulsadas el año pasado por los modelos familiares Ferrari Portofino M y SF90.
Las primeras unidades del modelo Daytona SP3, una edición limitada de la línea Icona, fueron entregados en el último trimestre de 2022.
Estos resultados fueron bien recibidos en la Bolsa de Milán, donde el título subió hacia las 14H20 (13H20 GMT) de un 4,44% ubicándose a 240,20 euros.
El fabricante prevé una facturación de hasta 6.700 millones de euros para 2026, según el plan estratégico presentado en junio de 2022 en la histórica sede de Maranello (norte).
Ferrari quiere lograr ese ambicioso objetivo lanzando quince nuevos modelos entre 2023 y 2026.
Europa-Oriente Medio-África fue el principal mercado de Ferrari en 2022, con 5.492 vehículos entregados, un aumento del 8,5%.
El envío de automóviles aumentó un 72,6 % en la región China-Hong Kong-Taiwán y un 21,8 % en las Américas.
La legendaria marca, conocida por su poderoso y rugiente motor de combustión, ha anunciado que va a pasar a lo eléctrico.
Los modelos 100% eléctricos e híbridos deberán representar el 60% de su producción en 2026 y el 80% en 2030, según su plan estratégico.