La compatriota y ministra, Liliana Alcaráz se une para liderar la batalla contra el lavado de activos y el financiamiento del terrorismo, al tomar las riendas como presidenta pro témpore del Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat) para el período 2024.
La titular de la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero o Bienes (Seprelad) fue nombrada durante la XLVIII Reunión de los Grupos de Trabajo y el Pleno de Representantes del Gafilat, celebrada entre el 11 y el 15 de diciembre del año en curso en la ciudad de Punta del Este, Uruguay.
El ascenso de Alcaraz al liderazgo de Gafilat no estuvo solo, ya que también se anunció la asunción del coordinador nacional de Guatemala, Jorge Marroquín, como Vicepresidente del organismo, según comunicado oficial emitido desde la Seprelad.
Gafilat, conformado por 17 naciones de América del Sur, Centroamérica y América del Norte, se alza como un pilar intergubernamental fundamental en la lucha contra el lavado de activos, el financiamiento del terrorismo y la proliferación de armas de destrucción masiva en la región.
La entidad no solo actúa como un bastión en la prevención y combate de estas amenazas financieras, sino que también teje una red de acción colaborativa entre sus miembros, dentro del contexto de una red global de mayor alcance.
Sus contribuciones se extienden a la provisión de asistencia técnica especializada tanto a organismos gubernamentales como privados. Además, promueve el cumplimiento de las 40 recomendaciones a través de evaluaciones mutuas rigurosas, otorgándole la facultad para desarrollar estándares propios con el fin de mejorar las políticas contra el lavado de activos y el financiamiento del terrorismo.
El Pleno de Representantes, órgano compuesto por delegados designados por cada estado miembro, es presidido por el presidente y el vicepresidente, quienes son elegidos para un período de un año, reflejando así la dinámica de renovación constante de liderazgo en esta vital organización regional.
La designación de Liliana Alcaraz como presidenta pro témpore de Gafilat marca un hito clave en la lucha unificada de la región contra prácticas financieras ilícitas y consolida su compromiso colectivo para fortalecer los mecanismos de prevención y persecución de delitos financieros en el hemisferio.