La gigante automotriz Tesla ha anunciado un retiro masivo del mercado de más de 2 millones de vehículos, luego de que la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés) de EE. UU. determinara deficiencias en su sistema de asistencia al conductor Autopilot. Según el regulador, este sistema no ofrece suficiente prevención contra el uso indebido.
La NHTSA ha llevado a cabo una investigación exhaustiva de defectos durante varios años, concluyendo que las medidas implementadas por Tesla para mantener a los conductores comprometidos resultaron insuficientes.
“La tecnología automatizada tiene un gran potencial para mejorar la seguridad, pero solo cuando se aplica de manera responsable”, mencionó la NHTSA en un comunicado. “La acción de hoy es un ejemplo de cómo mejorar los sistemas automatizados priorizando la seguridad”.
Tesla, en su informe de retiro del mercado, ha anunciado planes para implementar una actualización de software que incorporará controles y alertas adicionales, programada para comenzar alrededor del 12 de diciembre o poco después.
Sin embargo, las acciones del fabricante de automóviles cayeron hasta un 1,6% antes del inicio de las operaciones regulares, marcando el segundo retiro de mercado este año relacionado con los sistemas de conducción automatizada de Tesla.
El piloto automático, presente en todos los Tesla nuevos, utiliza cámaras para ajustar la velocidad del vehículo al tráfico circundante y asiste a los conductores para mantenerse en carriles claramente definidos. Tesla ha comercializado una funcionalidad de nivel superior llamada FSD Beta desde finales de 2016. Esta característica fue retirada del mercado en febrero, después de que la NHTSA expresara preocupaciones sobre su uso ilegal o impredecible, incluyendo exceder límites de velocidad y no detenerse por completo.
Estas acciones regulatorias son parte de investigaciones en curso desde accidentes fatales y problemas de seguridad asociados con los sistemas de conducción de Tesla, desencadenando más de 50 investigaciones especiales de accidentes vinculados al piloto automático. La administración actual bajo Biden ha acelerado el ritmo de estas investigaciones.
Además de la NHTSA, otros organismos regulatorios, como el Departamento de Justicia y la Comisión de Bolsa y Valores, también están examinando de cerca el papel de Tesla, incluyendo las afirmaciones de conducción autónoma y el papel de Elon Musk en su configuración.
El enfoque hacia la seguridad y la responsabilidad en la implementación de tecnologías de conducción automatizada se vuelve crucial a medida que la industria avanza hacia la autonomía total en vehículos. Tesla enfrenta un escrutinio cada vez mayor debido a estos desafíos regulatorios y de seguridad.