Las fotografías corporativas son elementos cruciales en la construcción de la imagen empresarial de una organización, marca o incluso de una persona. Estas imágenes no solo capturan la esencia, sino que también transmiten valores y cultura y por ello se merecen un trato muy especial.
En un mundo donde la imagen es fundamental, las fotografías corporativas desempeñan un papel trascendental en el branding y la conexión con el público objetivo. Agustín Vera, fotógrafo y propietario del estudio Dúo Fotografía, nos enseña un poco más desde su perspectiva como experto.
“Las fotografías corporativas son una herramienta efectiva para transmitir la identidad y los valores de una empresa. Mostrar a empleados sonrientes colaborando o participando en actividades corporativas puede reflejar la cultura y el ambiente de trabajo de la organización. Esta representación visual puede establecer una conexión emocional con los clientes y socios comerciales, generando confianza y lealtad”, explica .
Agrega que la utilización de imágenes profesionales aporta una serie de ventajas cruciales en comparación con las fotografías caseras o de stock. “Las imágenes profesionales destacan la originalidad de la empresa y sus productos, lo que puede resultar difícil de lograr con fotos genéricas. Además, estas imágenes inspiran confianza en los clientes potenciales, ya que transmiten un compromiso con la calidad y la autenticidad”, acotó.
Las fotografías corporativas pueden ser utilizadas en una variedad de contextos, siendo especialmente efectivas en las redes sociales, en el sitio web de la empresa y en plataformas como LinkedIn. Estas imágenes pueden aumentar la atractividad visual y la interacción con los clientes potenciales. Mostrar al gerente o a los empleados en un entorno de trabajo puede dar la impresión de transparencia y compromiso con la calidad, lo que refuerza la imagen de la empresa.
Agustín afirma que al planificar y realizar una sesión de fotografía corporativa, es fundamental tener en cuenta ciertos aspectos clave. Estos incluyen:
  • Comunicación clara con el fotógrafo para transmitir expectativas y asegurarse de obtener las imágenes deseadas.
  • Definir el estilo y tono de las imágenes que reflejen la identidad de la empresa y su público objetivo.
  • Asegurarse de que la vestimenta y la apariencia estén alineadas con la imagen que se quiere proyectar y que luzcan profesionales.
  • Elegir una locación relevante que se alinee con los objetivos de la empresa, ya sea en un estudio fotográfico, en la oficina o en un lugar externo.
“Los precios de las sesiones de fotografía corporativa varían según diferentes factores, como la ubicación y las necesidades del cliente. En nuestro estudio fotográfico, ofrecemos paquetes personales a partir de G. 300.000 y opciones personalizadas para sesiones en el lugar de trabajo, donde el presupuesto dependerá de la ubicación de la empresa o la locación elegida por el cliente”, dijo.
Por ende, las fotografías corporativas desempeñan un papel crucial en la construcción de la imagen empresarial, transmitiendo la identidad y los valores de la empresa de manera efectiva. La inversión en imágenes profesionales puede marcar la diferencia en la percepción de la empresa y su capacidad para conectarse con el público objetivo.