Aunque la mayoría de los usuarios del mundo escuchan música a través de plataformas digitales como Soundcloud, Youtube, o Spotify, el disco de vinilo está viviendo una época dorada y la venta de música en este soporte crece con fuerza.
Al parecer el vinilo está teniendo un resurgimiento gracias a que los fanáticos afirman que no hay mejor experiencia que la que ofrece un disco de este tipo. Y no se trata únicamente de que los melómanos y aficionados estén desempolvando sus viejos tocadiscos, sino que la industria musical está apostando por este soporte para el lanzamiento de nuevos álbumes.
A nivel mundial el vinilo está triunfando no sólo entre los intérpretes más nostálgicos, que quieren evocar tiempos pasados u ofrecer a sus seguidores más fieles aquella experiencia casi mística de sacar un disco, ponerlo sobre el plato y acoplar la aguja.
Contra todo pronóstico, los artistas que más vinilos vendieron el año pasado ni siquiera habían nacido cuando este formato empezó a agonizar. Cuando Taylor Switft lanzó su álbum ‘Midnights’, quizá ni sospechó que se iban a vender 945.000 de sus vinilos, según el informe Luminate U.S. Year-End Music Report for 2022.
Los otros dos artistas que completaron el Top 3 de ventas en vinilo en Estados Unidos en 2022 son aún más jóvenes que Taylor Swift: Harry Styles (29 años) y Olivia Rodrigo (20 años). Cuando ellos nacieron, ya se vendían menos de 2 millones de vinilos al año: 1,9 millones en 1994 y 1,5 millones en 2003.
Sin embargo, este soporte está viviendo un revival, ya que la venta está creciendo año tras año desde 2006, cuando tocó fondo. El crecimiento desde entonces fue muy suave, hasta hace dos años, cuando el mercado del vinilo experimentó un boom, llegando casi a duplicar las ventas del ejercicio precedente en Estados Unidos: 40 millones de discos en 2021, frente a los 23,7 millones vendidos en 2020.
Además, el mercado del vinilo parece haberse consolidado, ya que en 2022 se vendieron 41,3 millones de discos en este soporte en el país norteamericano, un 3,2% más que el año previo. Y pese a que está lejos de las ventas de su era dorada, ya se sitúa por encima de los registros del año en el que nació Taylor Switf.
Asimismo, cabe señalar que el vinilo ya es el formato físico más vendido, por delante del CD, en caída libre desde el arranque del presente milenio.