China ha decidido reabrir sus fronteras al turismo extranjero dejando caer así la última barrera creada bajo las políticas de la pandemia. El gigante asiático volverá a conceder todo tipo de visados para el viajero foráneo después de tres años de encierro.
China reabrirá sus fronteras a los turistas extranjeros por primera vez en los tres años transcurridos desde que estalló la pandemia del Covid-19, al permitir la expedición de visados de todas las categorías, incluso los turísticos.
La reanudación de la emisión de visados para turistas evidencia la voluntad de Pekín de normalizar los viajes entre China y el mundo, después de que en enero el gobierno retirase su advertencia a los ciudadanos contra los viajes al extranjero.
Las autoridades resaltan que para el segundo semestre del año ya se espera contar con una afluencia de visitantes interesante, pese a que el turismo no es uno de los principales impulsores de la economía para este país, eso se pudo notar cuando en 2019 el turismo internacional representó solo el 0,9% del producto interior bruto de China, antes del cierre de fronteras por la pandemia.
Las zonas de China que no necesitaban visado antes de la covid volverán a estar exentas de visado, según ha anunciado el Ministerio de Asuntos Exteriores. Esto incluye la isla turística meridional de Hainan, destino favorito de los rusos desde hace mucho tiempo, así como los cruceros que pasen por el puerto de Shanghai.
También se reanudará la entrada sin visado para los extranjeros procedentes de Hong Kong y Macao en la provincia más próspera de China, Cantón, lo que supondrá una gran ayuda sobre todo para los hoteles de lujo, muy populares entre los viajeros de negocios internacionales.