Por: Adelaida Alcaraz
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Cuando se habla sobre realidad aumentada es inevitable pensar en las películas de Iron Man o en el popular juego móvil Pokemon Go, pero esta tecnología ha ido más allá de Hollywood y se han desarrollado nuevas aplicaciones prácticas para el uso cotidiano. En Paraguay, la firma Aumenta ha conseguido innovar y ofrecer propuestas únicas a sus consumidores.
La aparición del covid-19 y la experiencia del confinamiento han puesto el foco en las soluciones digitales que ofrece el trabajo remoto. La realidad aumentada (RA) ha demostrado ser un activo valioso en ese aspecto, al tiempo que garantiza la resiliencia operativa y reduce los costes de operación.
La startup paraguaya Aumenta viene desarrollando proyectos con realidad aumentada desde el 2016. Esta firma es liderada por el joven empresario Aldo Orué, quien forjó un modelo de negocio B2B en el que propone aplicaciones móviles, páginas webs y filtros para redes sociales con realidad aumentada.
Además, ofrece productos que sirven para que las empresas puedan desarrollar sus propios contenidos de RA sin previo conocimiento en programación. “Buscamos que las compañías puedan insertar a sus productos una experiencia inmersiva. Por ejemplo, el cliente puede hacer un probador virtual, colocar muebles dentro de las habitaciones y muchas otras cosas más”, acotó Aldo.
El nuevo marketing en la era digital se enfoca en crear un efecto “wow” utilizando realidad aumentada en productos y servicios. Es así que a través de esta pequeña intervención, las compañías más innovadoras pueden llegar a su público objetivo de forma atractiva, informando y a la vez entreteniendo. Si bien, la RA está siendo muy utilizada en proyectos de gamificación, también puede ser aplicada en otros sectores.
Así un médico puede estar viendo las constantes vitales de su paciente mientras lo opera; un turista puede alzar su cámara y encontrar puntos de interés de la ciudad que visita, apuntando hacia los lugares a los que quiere dirigirse; o un operario es capaz de realizar labores de mantenimiento en una sala de máquinas, obteniendo información de en qué lugar se encuentran averías, simplemente apuntando con su tablet, y sin necesidad de consultar un complicado manual.
La realidad aumentada permite esto y muchas cosas más. Y es que esta tecnología no tiene igual cuando se trata de crear experiencias inmersivas e interactivas para que los consumidores puedan disfrutar de los productos, incluso antes de comprarlos. De allí que existe un inmenso potencial a desarrollar y aprovechar ya sea por los centros educativos, los medios de comunicación, las empresas de retail, e-commerce, e incluso por los sectores financiero y de bienes raíces.
La cartera de clientes de Aumenta está compuesta por alrededor de 50 empresas locales e internacionales. Actualmente, tiene presencia en Colombia, México, Panamá, Perú, Chile, entre otros países, en los que desarrolla soluciones para apps, webs y juegos.
Aldo aseguró que aplicar RA no es tan oneroso como se piensa. En efecto, en Aumenta ofrecen servicios que van a partir de USD 100 y que se incrementan de acuerdo a la complejidad.
Como novedad adelantó que están trabajando en un proyecto para la Itaipú Binacional. Se trata de una iniciativa de inclusión que pretende que personas con diferentes tipos de discapacidades puedan conocer más acerca de la hidroeléctrica y disfrutar del recorrido por la instalaciones. “Nos pidieron escanear maquetas y hacer que los contenidos sean inclusivos. Así, por ejemplo, las personas con discapacidad auditiva podrán apreciar elementos en 3D que irán saliendo encima de una maqueta. Este y muchos otros proyectos más se encuentran en fase de desarrollo”, indicó.
Las proyecciones. “Estamos en una etapa de expansión con miras a llegar a otros mercados. Ahora queremos enfocar nuestros esfuerzos en participar de alguna ronda de inversión y establecer otros tipos de relaciones comerciales en otros países de manera física. Apuntamos a Europa y EEUU, donde la RA está mucho más avanzada”, puntualizó