En Paraguay, el paraíso de la producción se encuentra en los departamentos de Alto Paraná, Central, Presidente Hayes y Amambay. Desde estos puntos estratégicos del país, se busca dinamizar la economía, atrayendo a inversionistas con deseos de prosperar.
Los parques industriales constituyen uno de los motores más potentes de la economía paraguaya, pues a través de ellos desembarcan inversionistas de todo el mundo buscando reconfigurar no solo su cadena de suministros, desde un punto cercano a sus proveedores y consumidores finales, sino también aspirando a expandir sus negocios hacia otras latitudes.
Actualmente, Paraguay cuenta con 17 parques industriales; 10 de ellos se encuentran en el departamento de Alto Paraná que, por las condiciones especiales que ofrece, como el acceso a energía eléctrica abundante y barata, conexión al mundo a través del Río Paraná, mano de obra calificada y cercanía a la triple frontera lo convierten en el punto neurálgico para las inversiones. En segundo lugar, sobresale Central, con 5 industrias importantes; en tanto que en Presidente Hayes y en Amambay esta modalidad está en pleno desarrollo, con 1 compañía cada uno.
Para conocer más detalles acerca del funcionamiento, costos de operación y desarrollos industriales que se vienen gestando desde estos puntos estratégicos del país, FOCO conversó con Marcos Barreto, director general de Desarrollo Regional y coordinador de parques industriales del Ministerio de Industria y Comercio (MIC), quien aseguró que existen ventajas importantes para las industrias que trabajan bajo este sistema.
El Parque Industrial de Algesa, cuenta con 31,5 hectáreas y se encuentra ubicado en el departamento de Alto Paraná. Foto: Gentileza
Los proyectos inmobiliarios que cobran protagonismo en torno a los parques industriales también son agentes dinamizadores de la economía, puesto que a mayor ocupación de la superficie, las obras de infraestructura crecen tanto interna como externamente.
Solo por citar algunos ejemplos, se mencionan los caminos internos, la franja de seguridad, ubicación estratégica próxima a rutas principales, energía eléctrica suficiente, sistema de tratamiento y disposición de residuos, sistema de prevención y combate de incendios, entre otros.
“Una de las ventajas que ocupa en mayor proporción la estructura de costos es el montaje del galpón, así como las naves o depósitos, cuyas dimensiones apropiadas y especificaciones técnicas de la industria hacen que cada recinto sea diseñado a medida y basado en el requerimiento de layout del cliente”, mencionó Marcos.
Otra ventaja competitiva digna de destacar es la versatilidad que ofrecen estos negocios ante la necesidad del mercado, desde un producto llave en mano con alternativas de financiación hasta opciones de pago en concepto de arrendamiento con alternativa de compra al final de cierto periodo contractual a largo plazo.
El Parque industrial Santa Mónica está asentado en el departamento de Alto Paraná. Tiene 30,8 hectáreas. Foto: Gentileza.
Paraíso de la producción. Entre los proyectos vigentes que gozan de buena salud, se destaca el Parque Industrial Mariscal Francisco Solano López, ubicado en la ciudad de Capiatá. En este parque de 41 hectáreas opera una firma dedicada al rubro de maquila, específicamente, a la producción de autopartes.
Por otro lado, también se encuentra la Terminal Occidental SA (TOSA) que cuenta con poco más de 1.100 hectáreas en Chaco’i que tiene un enorme potencial para desarrollar actividades empresariales, industriales, turísticas y habitacionales. En este parque existen industrias del sector cárnico, plástico y de combustibles, entre otras.
Almacenes Generales SA (Algesa), sobresale desde Salto del Guairá con 31,5 hectáreas. Este recinto incorpora el servicio de Terminal de Cargas en Ciudad del Este. Allí están asentadas industrias del sector metalúrgico y plástico, además de una fábrica de tapas de aluminio.
En Hernandarias, opera el parque industrial Santa Mónica con 30,8 hectáreas; este lugar dispone de 166 lotes para industrias que deseen sumarse a esta modalidad. Es uno de los sitios más apropiados para la puesta en marcha de empresas de cualquier tipo, teniendo en cuenta su ubicación y la cercanía con una ruta internacional. Actualmente, está operativa una fábrica de tejidos TNT.
Como novedad, Marcos refirió que a corto plazo será presentado un nuevo parque industrial. Se trata de Megalog. El mismo estará ubicado cerca del Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi, en la ciudad de Luque.
El Parque Francisco Solano López cuenta con 41 hectáreas. En este lugar opera una empresa maquiladora desde hace años. Foto: Gentileza.
Costos del servicio. Antes de decidir asentarse en un parque industrial es importante identificar tres variables que influyen, en gran medida, en la estructura de costos de operación de un complejo de esta envergadura.
Según Marcos, el primer aspecto a tener en cuenta está relacionado con el tamaño de la industria, ya que a mayor infraestructura aumenta la inversión; la tipología funcional es otro factor preponderante y, por último, los estándares de los servicios. Estos ítems influyen en los costos finales tanto para el que construye el parque industrial como para aquel que lo arrienda.
En la actualidad, a nivel regional y mundial, se valoran además aquellas empresas que reducen los niveles de rotación de personal e incrementan la productividad, siendo entonces las áreas verdes y recreativas, guarderías, centros de capacitación, instalaciones de salud, centros comerciales, servicios financieros, transporte público, espacios de esparcimiento y otros, algunos de los requerimientos más considerados.