Expertos afirman que la clase política parece no entender la gravedad de lo que implica sacar fondos para el sector educativo y el daño que puede producir esta acción a las futuras generaciones, aunque la educación es primordial para que el ser humano pueda salir de la pobreza y el país se desarrolle. Fue durante un debate denominado Plaza Pública organizada por Desarrollo en Democracia (Dende) que reunió a Carmen Romero, directora ejecutiva del Fondo para la Excelencia de la Educación y la Investigación y a Víctor González Acosta, empresario, miembro del Consejo Nacional del FEEI.
Hace diez años, cuando Paraguay comenzó a recibir mayor cantidad de recursos por la cesión de energía de Itaipú se buscó que parte de esos recursos sean destinados a educación y que estén blindados para que no sean utilizados para gastos rígidos del Estado, lo que permitió que se aprobara la Ley de Fonacide. Gracias a esta acción nació el Fondo para la Excelencia de la Educación y la Investigación (FEEI), que se financia con el 30% de los fondos de Fonacide.
Carmen Romero recordó que el primer proyecto del FEEI, que se creó ante la necesidad de blindar recursos para la educación, se aprobó en diciembre de 2013 y comenzó a ejecutarse a inicios de 2014 y desde entonces 16 proyectos por USD 642 millones están en ejecución, lo que permitió el aumento del 300% de la producción científica. Agregó que están comprometidos y en estudio proyectos por USD 789 millones.
La representante del FEEI señaló además que la primera perforación a la ley que creó el FEEI se dio en el año 2015 y desde entonces, tanto por decisiones políticas como por situaciones relacionadas con la naturaleza (bajante del río), se dejó de percibir USD 140 millones, aproximadamente.
Recordó que en el 2023 hay una renegociación del Tratado de Itaipú, lo cual puede afectar a la Ley de Fonacide y al FEEI.
“Sería bueno volver a tener una sociedad civil organizada que levante la bandera de hace 10 años cuando comenzaron con esta idea y con esta ilusión de lo que era el Fondo de Excelencia y que le permita una continuidad. Es importante pensar en el FEEI después del 2023″, afirmó.
Recorte de fondos. El empresario Víctor González Acosta señaló que la mejor manera de sostener este programa en el tiempo es que la ciudadanía se empodere de este proyecto.
“Creo que este es el testimonio de la falta de compromiso de nuestra clase política, es duro decirlo, con el futuro de nuestro país, con la visión de un país que se desarrolle con triple impacto, un país que se desarrolle no solo económicamente, sino socialmente, ambientalmente, de eso se trata”, expresó Acosta.
Manifestó que para lograr un crecimiento en estos tres ejes es fundamental el desarrollo de capital humano y el acceso a bienes públicos de calidad, como es la educación, y consideró que se está poniendo una traba a una visión de desarrollo a cambio de gastos políticos.