Luis Vivanco
Profesor Asociado de Fundación Don Cabral
El mercado de crédito corporativo, especialmente en un momento de pandemia, se ha vuelto muy relevante y favorecido con la caída de las tasas de interés y las políticas gubernamentales expansivas en los países latinoamericanos. Este hecho ha estado posibilitando la toma de recursos de terceros que alivian la posición de caja en el corto plazo, pero deben estar bien asignados para generar un beneficio operacional real para la empresa.
Para orientar y elegir una operación crediticia satisfactoria, comparto recomendaciones que suelen ser de gran importancia:
1) Comparar diferentes instituciones financieras: Hay varias instituciones financieras que ofrecen diferentes propuestas de financiamiento. Por tanto, haz comparaciones entre instituciones, ya que te permitirán tener una visión del conjunto, y comprobar cuál ofrece la mejor solución crediticia.
2) Elaborar un plan de negocios: La institución que otorgará el crédito podrá reducir su nivel de riesgo crediticio si la empresa cuenta con planificación financiera, lo que se verá reflejado en una reducción de los cargos financieros. Por lo tanto, hay que elaborar un plan de negocio y un plan financiero para demostrar la solvencia.
3) Evalúe su necesidad de crédito: Dependiendo de la situación financiera de la organización, tomar crédito para tener más dinero con el fin de aumentar el volumen de compras puede complicar aún más su situación y aumentar su grado de riesgo financiero en relación con los posibles acreedores.
4) Verificar el Costo Efectivo Total: El costo efectivo total de la operación incluye identificar y verificar los cargos cobrados por el banco tales como impuestos, tarifas, seguro, apertura de registro. Tenga en cuenta todo esto, y no solo los intereses, al calcular el costo real del negocio.
5) Financiar el crecimiento y no la deuda preexistente: La necesidad de financiar el crecimiento, o la inversión que generará un aumento en el retorno o el mantenimiento de la rentabilidad de la operación en el futuro es la mejor opción, en lugar de financiar una deuda preexistente. Al analizar la estrategia de financiamiento, el liderazgo debe tener en cuenta el período de retorno de la inversión para equiparar la salida de efectivo con la entrada de efectivo resultante de la operación, con el fin de no permitir que el efectivo utilizado como capital de trabajo se use para pagar la inversión. Idealmente, el rendimiento de la inversión debería ser mayor que la tasa de financiación.
6) Financiamiento para la mejora de procesos: Todo emprendedor reconoce la importancia de invertir en desarrollo del equipo o sistemas para mejorar sus procesos, gestión de inventario, servicio o entrega de productos. Esto afecta su reputación y su capacidad para vender más. Por tanto, el uso de las finanzas puede tener un efecto multiplicador positivo en este contexto.
7) Renegociar o llevar a cabo la portabilidad de la deuda: Con el escenario de reducción de tasas de interés y programas de financiamiento gubernamental subsidiado, existe la posibilidad de renegociación y/o portabilidad de la deuda bancaria de un banco a otro, en busca de una tasa más favorable.
8) Verifique cómo la proyección futura de un índice económico afecta la participación de su deuda: Algunos préstamos se otorgan con cuotas constantes y otros con cuotas vinculadas a índices económicos, tales como: índice de inflación, tasa de interés y otros. En el caso de un préstamo con alguna indexación, es responsabilidad del liderazgo verificar qué índice es más barato, en el sentido de que el pago de cuotas futuras no se vea afectado negativamente por el aumento del índice.
En la Fundación Don Cabral, a través del Programa PAEX, ayudamos a líderes a comprender los argumentos que soportan la decisión del apalancamiento empresarial como parte de la responsabilidad del área de gestión financiera corporativa siempre con el objetivo de disminuir el riesgo de liquidez y permitir que las organizaciones estén menos agobiadas por altos cargos financieros que dificultan la solvencia de la organización y elevan el riesgo corporativo