Con el paso de los años, las aseguradoras han crecido tanto orgánicamente como a través de fusiones y adquisiciones, sumando capas de infraestructuras heredadas y combinando códigos que con frecuencia dificultan la conexión con los sistemas centrales. Si bien la modernización de los sistemas es un reto nada fácil de superar, según un estudio publicado por Forrester Consulting encomendado por Red Hat, muchos actores del sector entienden que hoy es el momento exacto para hacerlo.
Las aseguradoras necesitan modernizar estos sistemas centrales para aumentar la flexibilidad, ahorrar costos y mejorar su capacidad de respuesta ante las crecientes necesidades digitales de sus asegurados.
Es por ello que modernizar las aplicaciones centrales es crucial para el éxito del negocio. Probablemente alguna vez haya visto esos comerciales de seguros que muestran al asegurado llamando a su compañía de seguros inmediatamente después de haber sufrido un incidente menor, y al agente de seguros atendiendo y resolviendo todo al instante de manera mágica.
El objetivo es hacer uso de nuestro seguro únicamente en momentos de dificultad. Por eso es importante para el consumidor que las aseguradoras cubran las necesidades de los asegurados con rapidez y a la vez sean lo más eficientes, productivas y rentables posible. La capacidad de una empresa de atender necesidades específicas con rapidez está directamente relacionada con la tecnología que utiliza y, según el estudio de Forrester, el 62% de los encuestados “creen que las iniciativas de modernización de su sistema central son el componente más crítico de sus estrategias de negocios digitales”.
La mayoría de los encuestados también reconocieron ser incapaces de lograr ese objetivo por sí solos y que precisan trabajar con un proveedor para que esas iniciativas den frutos. Por este motivo, al momento de elegir y evaluar proveedores, uno de los criterios claves es realizar una adecuada selección de proveedores.
Los desafíos de la modernización. Aunque las aseguradoras reconozcan la necesidad de modernizarse, existen desafíos que les impiden hacerlo. Entre los principales retos que enfrentan los encuestados mencionaron la migración de datos, la integración con sistemas de desarrollo inicial/producción, la migración a la nube y la conversión de datos
Estos desafíos ponen de relieve tanto la vacilación del sector de seguros de migrar a la nube como la posible consecuencia de no hacerlo: quedar rezagados respecto de la competencia, no poder cumplir con las necesidades de los grupos de interés y no contar con las capacidades implementadas para eventualmente migrar.
No basta con trasladar los sistemas centrales heredados a la nube. Deben optimizarse para sacar el máximo provecho, en especial en vista del esfuerzo realizado. Si bien la implementación de una nube con uno o más proveedores es un paso en la dirección correcta, una infraestructura de nube híbrida abierta puede facilitar la modernización e innovación de fondo al promover un conjunto más amplio de tecnologías en el centro de datos y las nubes públicas. Los equipos de tecnología quedarían liberados para generar nuevas experiencias para el usuario, crear y comercializar ofertas, optimizar operaciones y gestionar talento en toda la empresa usando las mismas herramientas que utilizan para las tareas ordinarias.
Modernizar aplicaciones centrales puede producir muchos beneficios. Según las respuestas de los encuestados, los principales beneficios incluyen:
● una TI más veloz (66 %)
● una TI más ágil (61 %)
● una experiencia del usuario optimizada (59 %)
● un desarrollo más veloz (54 %)
Estas estadísticas muestran que los beneficios de cambiar la tecnología heredada por una nube híbrida abierta pueden superar los riesgos. No obstante ello, esta transición puede ser una tarea abrumadora, especialmente si no se sabe qué priorizar en el proceso.
Una plataforma de nube híbrida abierta —como Red Hat OpenShift Container Platform— ofrece una plataforma de contenedores empresarial moderna que permite a las aseguradoras utilizar múltiples entornos, tanto locales como nubes privadas y públicas. Esto crea una base común que permite lograr un balance entre lo que está bien actualmente y continuar ofreciendo adaptabilidad para escalar e implementar mejoras a medida que evolucionan los requerimientos. Implementar una nube híbrida abierta flexible también ayudará a las aseguradoras a hacer frente a los desafíos a medida que surjan y evitar la dependencia del proveedor que generan los sistemas heredados inflexibles y que podrían existir en ese momento.
Es muy importante que las aseguradoras cuenten con la tecnología necesaria para poder atender las diversas necesidades particulares de los asegurados. En Red Hat, la plataforma de nube híbrida puede ayudar a las aseguradoras a transitar su camino hacia la nube ofreciéndoles un conjunto de herramientas que propician una metodología DevOps moderna y, a la vez, brindándoles la flexibilidad de construir y ejecutar aplicaciones escalables en cualquier entorno donde funcione OpenShift.
Los seguros constituyen un negocio extraordinariamente personal dado que se dedican a proteger a los clientes y ayudarlos a recuperarse en momentos angustiantes de pérdida.
Mientras atravesamos un cambio sin precedentes en la economía como resultado de nuevos métodos de trabajo y ante la transformación del ambiente laboral en entornos totalmente digitales, las aseguradoras necesitan enfocarse en los aspectos específicos relacionados con las inquietudes de los asegurados, sin preocuparse por las limitaciones de ejecutar sus aplicaciones centrales en tecnologías heredadas.