El sabor a distinción lleva el sello de Ghirardi Ferro, una marca que conquista a los consumidores más exigentes.
Entre la tradición y la innovación. Así nace Ghirardi Ferro, una marca que rinde homenaje a la cultura chocolatera italiana con dos novedosas propuestas que combinan productos premium, procesos de elaboración antiguos y nuevas tendencias destinadas a conquistar a los paladares más refinados.
“Nuestra empresa de chocolates surge de la idea de generar productos relacionados al cacao que se fusionen con la cultura paraguaya”, explicó Francisco Martino, socio fundador de Ghirardi Ferro, una empresa que lleva tres años dedicándose al rubro gastronómico, pero que considerando la situación actual -fruto de una prolongada crisis sanitaria- decidió avanzar con el lanzamiento de los productos de chocolate como una alternativa para competir en el mercado.
Al respecto, Francisco afirma que la industria nacional tiene potencial y capacidad para elaborar productos de nicho y de alto valor agregado que sean atractivos tal como lo son las presentaciones de las grandes empresas internacionales. Es por ello que, esta marca paraguaya proyecta trascender fronteras y llegar a sitios nunca antes imaginados.
El emprendedor. Un dato no menor, digno de destacar, es que el emprendedor proviene de una familia que lleva más de 30 años abocada al rubro alimenticio. De allí que sus conocimientos y manejo en el segmento de la gastronomía son vastos y se complementan con los adquiridos en el núcleo empresarial-industrial, pues también desempeña funciones en la UIP Joven y en la Fundación Industrial, organizaciones que coadyuvaron para que pudiera relacionarse con varios emprendedores de los cuales pudo aprender y consiguir la ayuda necesaria para llevar adelante el proceso de creación y lanzamiento de su marca.
El Covid-19 puso a prueba su capacidad de gestión y lo sometió a varios desafíos tales como mantener al equipo de trabajo motivado en circunstancias poco favorables, saber ahorrar lo suficiente como para mantener el emprendimiento a pérdida como mínimo por 6 meses y crear un emprendimiento multi rubro para hacer frente a lo que se presente.
“El mundo gastronómico sufrió un golpe enorme con la pandemia, el promedio de facturación fue de un 50% menos que los años anteriores, a esto sumado los costos adicionales que surgen de adaptar el local a los requerimientos sanitarios. Pero nosotros tomamos esta crisis sanitaria como un reto que nos obligó a desempolvar los proyectos y llevarlos adelante”, explicó.
Mundo chocolatero. Actualmente, la empresa ofrece dos variedades de productos que vienen en presentaciones de 200 gramos. Una de ellas es la Pasta de Avellanas, ideal para acompañar las meriendas y darle ese toque y sabor tan característicos que aportan los frutos secos.
Esta pasta es resultado de una exhustiva selección de materias primas cuya estrella principal es la nuez de avellana, la cual se somete a un proceso de tostado y pelado que da su característico sabor. “Se trata de una pasta que se distingue por ser suave al paladar, dulce en el punto justo para permitir que los consumidores tengan una exquisita experiencia”, refirió.
La segunda propuesta es una Pasta de Chocolate que rememora los orígenes y tradición del chocolate italiano. Está compuesto de cacao holandés fermentado y procesado para obtener los mejores sabores del mundo. Esta pasta es apropiada para hacer cremas de relleno y postres, aunque también puede ser untado con panes, galletitas y alfojores.
Lo nuevo. Además del emprendimiento en pastas, Ghirardi Ferro, ajusta detalles para sacar su línea de Cucuruchos de Oblea con la intención de poder proveer a las heladerías nacionales de un producto de excelente calidad y a un buen precio.
Por otra parte, en los planes de Francisco figura la exportación, tanto para las pastas como los cucuruchos, por lo que el emprendedor trabaja afanosamente en cumplir con todos los requisitos y trámites que deben ser realizados antes de dar este importante paso.