Desde la Unicef compartieron consejos para propiciar a que las experiencias de los niños y niñas en internet sean seguras y positivas. Además, se insta a recordar la importancia de equilibrar el ocio que ofrece internet con actividades externas que no dependan de la red, incluidas las salidas al exterior si fuera posible.
Durante este nuevo confinamiento es probable que los hijos pasen mucho más tiempo conectados a internet. Estar conectados ayuda a los niños y adolescentes a reducir el impacto emocional de esta nueva normalidad y les anima a continuar con sus vidas; sin embargo también es un espacio de alto riesgo para los menores.
Desde la Unicef compartieron consejos para propiciar a que las experiencias de los niños y niñas en internet sean seguras y positivas.
1. Mantenerlos seguros con una comunicación abierta. Entablar un diálogo sincero con los hijos sobre cómo y con quién se comunican. Asegurarse de que comprenden el valor de las interacciones cordiales y solidarias, y que un contacto inadecuado, discriminatorio o agresivo es inaceptable. Animarlos a que si pasan por cualquiera de estas experiencias te lo cuenten inmediatamente, a ti o a un adulto de su confianza. Mantenerse alerta si el niño o niña parece preocupado o se muestra reservado durante sus actividades en internet, ya que esto podría ser un signo de que está sufriendo ciberacoso. Además, llegar a un acuerdo para establecer unas normas sobre cuándo y dónde pueden utilizar los dispositivos.
2. Utilizar la tecnología para proteger a los niños. Comprueba que el dispositivo lleva incorporados los programas más recientes de software y de antivirus. Mantén cubiertas las cámaras web cuando no se usen. Las herramientas de control parental, incluyendo las de búsquedas seguras, pueden ayudar a los más pequeños a que su experiencia en internet sea positiva.
Mostrarse prudente con los recursos educativos gratuitos en internet. En ningún caso el menor debe proporcionar su nombre completo o una foto suya al utilizar estos recursos. Recordar que se debe comprobar la configuración de privacidad para reducir al mínimo la recopilación de datos. Enseñar a los menores a mantener en privado su información personal, sobre todo ante desconocidos.
3. Pasar tiempo con ellos en internet. Generar actividades para que los hijos disfruten de interacciones positivas y seguras con los amigos, los familiares y padres. En este momento, conectarse con otras personas es más importante que nunca y puede ser una excelente oportunidad para formar un modelo de fraternidad y empatía en las “interacciones virtuales”.
Ayudar a los hijos a reconocer y evitar aquellas informaciones erróneas y contenidos inapropiados para su edad que puedan aumentar su ansiedad con respecto al virus de la COVID 19. Numerosos recursos digitales de organizaciones como UNICEF y la Organización Mundial de la Salud están a tu disposición para que aprendan juntos sobre el virus.
4. Potenciar hábitos saludables en internet. Promover vigilar una buena conducta en internet y en las videoconferencias. Alentar a los hijos a que sean amables y respetuosos con sus compañeros de clase, a que pongan atención en la ropa que lleven puesta y eviten sumarse a videoconferencias desde un dormitorio.
Puesto que pasan más tiempo en internet, los niños pueden estar expuestos a ver más anuncios que quizás promueven alimentos poco saludables, estereotipos sexistas o material inapropiado para su edad. Ayudarlos a reconocer dichos anuncios y aprovecha la oportunidad para explorar juntos los aspectos negativos que veas en los mensajes.
5. Dejarles que se diviertan y que expresen sus opiniones. Pasar tiempo en casa puede ser una gran oportunidad para que los hijos se expresen en internet, compartan sus puntos de vista y respalden a los más necesitados durante esta crisis. Se debe animar a los hijos a que aprovechen las herramientas digitales que los estimulen a ponerse en pie y moverse, como vídeos de ejercicios físicos para niños y videojuegos que requieran mover el cuerpo.
No te olvidar la importancia de equilibrar el ocio que ofrece internet con actividades externas que no dependan de la red, incluidas las salidas al exterior si fuera posible.
Fuente: información ofrecida por Sarah Jacobstein, Child Rights & Business Specialist, UNICEF USA