Contribuir en el proceso de digitalización de los docentes y sentar bases para más iniciativas de formación digital, fue el principal impulso de docentes voluntarios que brindaron su granito de arena para encaminar al país hacia la educación digital e innovadora.
Para generar un impacto real en la sociedad y encaminar el cambio, desde el sector que toque estar, no hace falta crear una organización o instalar grandes campañas, basta con compartir tus conocimientos y brindar un poco de tu tiempo. Así lo demostraron las docentes voluntarias que formaron parte del proyecto de Transición a la Educación Digital (TED) para la capacitación de cientos de docentes de todo el país.
Desde FOCO conversamos con Elida Moreno, Cristina Bustamante, Carmen Onieva, Janisse Jara, María José Giménez, Brenda Rojas y Paola Ledesma quienes dijeron sí a la posibilidad de impactar en la formación digital de otros docentes y, por ende, en el sistema educativo en general que debió adaptarse a las nuevas exigencias de la pandemia.
Estás mujeres formaron parte del programa que capacitó en herramientas digitales a más de 500 docentes de distintos puntos del país a través de un total de 24 webinars. Además, realizaron 10 módulos sobre educación socioemocional, que permitieron 120 réplicas y llegaron a más de 1.200 docentes. Es por esto que en estas líneas, ellas comparten sus experiencias, conocimientos y visión de la educación.
Aportar a la causa. “Sentí la necesidad de sumarme a esta iniciativa por el deseo de aportar mis conocimientos y experiencias, para brindar herramientas a los docentes de todo el país y ayudarlos así a sobrellevar este gran desafío de educar en tiempos de pandemia”, sostuvo Elida Moreno quien formó parte del equipo organizador y brindó un taller sobre el uso del WhatsApp en clase como herramienta de gestión.
Elida Moreno (26 años). Licenciada en Comercio Internacional.
En cuanto a si la educación TED puede ser una realidad en Paraguay Elida mencionó que este 2020 nos demostró que sí se puede incorporar mayor uso de la tecnología para continuar con el proceso de aprendizaje, sin embargo, aún hay mucho por hacer para que dar clases de calidad vía internet sea una realidad en cada rincón del país.
Asimismo, recordó que la educación debe ser una causa nacional, donde el sector público y privado trabajen juntos para dotar de las herramientas adecuadas para que los docentes puedan orientar y entrenar a los alumnos en habilidades para la vida.
Liderazgo participativo. Como exbecaria del programa BECAL, Cristina Bustamante quiso retribuir con su conocimiento adquirido en otro país, participó como moderadora, contribuyó en la elaboración de materiales, coordinó y elaboró el proyecto de capacitación para líderes del Paraguay.
Cristina Bustamante, Magíster en Ciencias de la Educación.
“El proyecto de capacitación para líderes del Paraguay fue una experiencia maravillosa donde estuvieren inscritos más de 800 profesionales de todos los departamentos del país. Se pudo interaccionar- a través del webinario- con líderes que capacitaron y se pusieron a disposición para futuras actividades”, agregó.
Con relación a la acogida por parte del personal docente, Cristina explicó que esta fue muy buena, que existen muchas ganas de aprender y la participación de profesores del interior permitió un mayor conocimiento de la realidad país. En este sentido, destacó la necesidad de más capacitaciones a nivel país y organizadas por departamentos, de acuerdo a la necesidad de cada sector; para que de esta manera el docente pueda abrirse a la innovación y al pensamiento del siglo XXI.
También recordó que el alumno debe trabajar en equipo con el docente. “Comprendiendo que en este tiempo que nos toca vivir estamos creciendo todos y puede aportar sus conocimientos informáticos, que en muchos casos son mayores que el de los docentes. Este debe ser un compromiso de todos”, agregó.
Por último, señaló que la educación paraguaya necesita un profundo análisis de la situación actual, identificar y recabar la información de lo realizado en el 2020 para poder trazar el norte. Proceso en el que deben participar autoridades públicas, directores, docentes e integrantes de la sociedad civil quienes trabajaron y se han destacado a pesar de las adversidades.
“Necesitamos un equipo de lideres comprometidos, resilientes, con amor a la patria, pero con la firme convicción que la clave del éxito es el esfuerzo y que de cada uno quienes trabajamos en educación depende dejar un mejor país para las nuevas generaciones. Tampoco debemos olvidar a los Becarios -personas en las que se invirtió y falta un seguimiento posterior- ocupando cargos cuyo rol es de suma importancia en este contexto”, finalizó.
Repensar el rol docente. Para Carmen Onieva la era digital ha motivado un necesario repensar en cuanto al rol del docente en el aula. “Surgió dentro de mi cuestiones como si la manera de aprender ha cambiado, por ende, también la forma de enseñar y buscaba respuesta a estas interrogantes. Esto me impulsó a ser parte de la iniciativa”, explicó.
María del Carmen Onieva (63 años) Docente.
En este contexto recuerda que el conocimiento esta en red y el profesorado debe ser quien acompañe al alumnado en su proceso de aprendizaje ya que la tecnología por sí sola no guía, de allí que la labor del docente hoy es más importante que nunca. También destacó que la educación no solo es asunto de los docentes y de los que deciden de políticas públicas, sino de la sociedad en su conjunto.)
“Sin honestidad, ni compromiso de los políticos y sin demandas ciudadanas permanentes (proveer a los docentes herramientas adecuadas) , la educación podría limitarse a un mero trámite formal en el que los habitantes del país gastan sus años de juventud sin desarrollar capacidades ni dotar de contenido sustantivo (habilidades) a sus vidas”, afirmó.
Mejores oportunidades para todos. “Considero que la educación se construye en colaboración de todos y todas”, afirmó Janisse Jara quien se unió a esta iniciativa porque el 2020 fue un año más que desafiante y necesitaba de la ayuda de personas movidas hacia el mismo propósito, lograr una educación de calidad que brinde mejores oportunidades para todos.
Janisse Jara (27 años) Economista. Especialista en Didáctica Universitaria.
“La pandemia hizo más visible la importancia de trabajar los desafíos de la educación a distancia, pero en realidad esto ya era algo que estaba latente desde hace tiempo y pocos la consideraban relevante. De allí mi interés en aportar en ese enfoque, teniendo en cuenta que el desarrollo de las habilidades socioemocionales evita la deserción”, indicó.
En cuanto al desafío de empoderar a los niños, niñas y jóvenes, hizo hincapié en que la educación debe inspirar y motivar a los estudiantes y esto se logra con el aprendizaje experiencial, en donde los mismos son protagonistas de su propia formación. “Por ello es importante contar con un proceso de capacitación docente que brinde estrategias pedagógicas innovadoras de metacognición y el desarrollo de las habilidades socioemocionales”, afirmó.
También destacó la fortaleza socioemocional de los docentes, quienes pese a los grandes desafíos que enfrentaban, tanto en lo personal como en lo laboral, brindaban lo mejor de ellos para llegar a todos sus aprendices.

Más jóvenes y más capacitados. Para María José Giménez, el fortalecimiento de la transición a la educación virtual requiere de mayor participación de jóvenes en la labor docente y de que todas las personas que hoy día se desempeñan en la carrera tengan acceso a capacitación de calidad aplicable a su contexto real.
Majo Giménez Duarte (28 años) Docente
“Por otro lado, se debe replantear el rol de docentes y estudiantes como co-constructores de la educación porque en el contexto digital se derriban las barreras ficticias que hacen que estudiantes sean sólo receptáculos de información y les pone al centro del aprendizaje, capaces de gestionar el contenido al que acceden, el medio, el momento, y el alcance que el producto final de un proceso de aprendizaje pueda tener”, añadió.
Con relación al empoderamiento de los estudiantes indicó que el primer desafío son las grandes desigualdades, pero otros dos grandes desafíos son el adultocentrismo y la incertidumbre con la cual estamos encarando el futuro. María José explicó que el adultocentrismo no permite que las voces de la niñez, la adolescencia y la juventud sean realmente escuchadas y tomadas en cuenta al momento de accionar sobre temas que les afectan a ellas en primer lugar.
”Esto se ve en las relaciones entre las personas jóvenes y las personas adultas dentro del aula, en los centros estudiantiles, en los movimientos estudiantiles y en las altas esferas de decisión. No es fácil erradicarla, pero tomar conciencia de esta tendencia que tenemos y tomar acciones concretas para evitarla nos va a ayudar con el tercer desafío que es la incertidumbre. No sabemos para qué futuro le estamos preparando a nuestra niñez y adolescencia y este año que pasó nos demostró qué tan incierto es realmente ese futuro. Una manera de contrarrestar esta incertidumbre es escuchando lo que ellas nos están pidiendo hoy y empezar a planificar desde ahí”, detalló.
Por último, invito a más personas de todas las edades, niveles de experiencia, conocimientos y procedencias a unirse a este proyecto. “La educación nacional es reflejo de lo que valoramos y soñamos como sociedad, y ¿qué mejor oportunidad que ésta para empezar a contribuir activamente a que ese reflejo sea uno esperanzador, inclusivo y representativo de lo mejor de Paraguay?”, finalizó.

Modelo Blended Learning. Con la realidad del país, el modelo de enseñanza híbrida (presencial y virtual) es una de las opciones más convenientes para todos los niveles de la educación, sin embargo también requiere de algunas innovaciones, aprendizaje y constancia. “Este modelo es una opción viable si se implementan políticas de innovación que favorezcan al sistema educativo en su totalidad, especialmente a los sectores más afectados ante la ausencia de recursos adecuados para un uso correcto del modelo Blended Learning”, indicó Brenda Rojas.
Brenda Rojas (27 años) Licenciada en Administración de Empresas
Con el foco en la educación superior, resaltó que una de las principales ventajas de la educación digital es que ayuda al estudiante a desarrollar muchas habilidades y competencias que se necesitan hoy en día en el mercado laboral; los alumnos logran ser más independientes y autónomos, ya que se encuentran en constante actualización.
En cuanto al involucramiento ciudadano en la construcción de la educación señaló que el mismo ofrece una perspectiva más democrática. “A través de la participación ciudadana se conocen otras realidades y experiencias, las cuales contribuyen de forma positiva en la realidad social y educativa”, acotó.
Asimismo, dejó el mensaje de que para construir un país justo y democrático es necesario que la educación sea una prioridad elemental, de esta manera los ciudadanos y las futuras generaciones, serán capaces de transformar el país.
Oportunidades en el exterior. Por su parte, Paola Ledesma coincide en que el modelo b-learning es bastante aplicable a la educación paraguaya, y además es una oportunidad para facilitar el acceso a carreras universitarias en el exterior. Pero, para lograr esto considera necesario fortalecer la cultura digital y centrarse en las ventajas que ofrece el entorno digital.
Laura Ledesma
Este entorno de cultura digital involucra a los docentes quienes deben recibir mayor capacitación sobre herramientas digitales, acompañamiento y recursos para su aplicación. Mientras que los alumnos deben ser involucrados en el desarrollo de nuevas herramientas.