Jason Spero, vicepresidente global de Soluciones de Performance de Google, reflexionó sobre los nuevos hábitos de compra de los consumidores y, en particular, sobre cómo se ha modificado el vínculo entre las experiencias físicas y las digitales.
Es sabido que la vida es y se siente muy distinta en comparación de cómo era a principios de año. El uso de la tecnología que hacen las personas y las empresas se potenció durante el confinamiento, lo que aceleró la adopción del trabajo remoto, el aprendizaje en línea y el comercio electrónico, así como las conexiones sociales por Internet. Las personas pasan más tiempo en línea que nunca y recurren a Google para explorar, investigar y planificar sus compras, ya sea en línea o en el mundo real.
Tener una tienda física en este momento es sumamente difícil. Aun así, los retailers de todos los tamaños están descubriendo que maximizar su presencia en línea puede ayudarlos a llegar a clientes potenciales que desean realizar compras en persona.
De acuerdo con el especialista, vincular las experiencias de venta minorista físicas y digitales es más importante que nunca. Las personas planifican sus visitas a las tiendas con más cuidado, lo que implica un mayor interés por la información en tiempo real. Desean saber qué productos están en stock, si la tienda ofrece retiros en la puerta y cuál es el horario de atención. Todos quieren tener la certeza, antes de salir de casa, de que encontrarán lo que buscan.
Por ejemplo, en la Argentina, las consultas sobre productos “en stock” aumentaron más del 60% en los últimos 3 meses. Al mismo tiempo, las compras locales se volvieron aún más importantes: se duplicaron a nivel mundial las búsquedas que incluyen la frase “disponible cerca de mi ubicación”.
Los minoristas de todos los tamaños están descubriendo que maximizar su presencia en línea puede ayudarlos a llegar a clientes potenciales que desean realizar compras en persona.
Según investigaciones recientes de Google, la pandemia hizo que las personas se volvieran más flexibles a la hora de decidir si realizar compras en línea o en tiendas físicas. El 73% afirma ahora no tener en cuenta el canal, en comparación con el 65% antes de la crisis sanitaria mundial. Si bien la pandemia aceleró la adopción digital y las ventas en línea están aumentando, las nuevas investigaciones de Euromonitor prevén que el 78% de las compras se seguirán realizando en tiendas físicas para el año 2024.
Sin embargo, los negocios seguirán enfrentando tiempos difíciles en el futuro. El entorno minorista seguirá evolucionando rápidamente y las herramientas de marketing en línea contribuirán a la recuperación. “Si bien no sé qué nos deparará el próximo año, tengo la certeza de que el uso de la tecnología ayudará a las personas y empresas a prepararse para lo que se viene”, finalizó.
Fuente: Think with Google