El sector agrícola en Paraguay es un segmento clave de la economía. El cambio climático y, principalmente, las sequías presentan un alto riesgo, especialmente para los pequeños agricultores. En Paraguay, se estima que el mercado potencial es de alrededor de 265.000 productores, dedicados a diversos rubros. En este escenario fue analizado el rol del microseguro agrícola en el manejo del riesgo de pequeños agricultores.
El encuentro virtual, realizado el martes 17 de noviembre, contó con la presentación de Regina Simões, coordinadora regional para América Latina de la Secretaría de la Iniciativa de Acceso a Seguros (A2ii), y Delfín Benítez, gerente agropecuario de la Aseguradora Tajy. Entre los asistentes, se registraron representantes del Banco Central del Paraguay, compañías de seguros, intermediarios, corredores y EMPEs.
Simões abordó las tendencias en regulación y supervisión, y presentó los diversos productos innovadores que se están implementando en la región en materia de seguros para pequeños agricultores.
Explicó que estos productos pueden variar según el activo cubierto, los principales riesgos, el tipo de cobertura y el alcance de dicha cobertura. “La naturaleza y el clima son sus principales fuentes de riesgo, y el riesgo natural tiende a ser sistémico, ya que afecta a toda un área y a una cartera asegurada al mismo tiempo”, explicó la experta.
Asimismo, enfatizó la importancia del desarrollo agrícola para el logro de objetivos sociales y económicos, por lo que se vuelve importante la promoción de seguros inclusivos y responsables, reduciendo así la vulnerabilidad.
Por su parte, Benítez tuvo a su cargo la presentación del caso de Tajy en la implementación del microseguro agrícola paramétrico para sésamo, esquema de transferencia de riesgos permite que el agricultor se proteja ante eventos climáticos adversos que afecten sus cultivos. Si se produce el evento cubierto por el seguro, el productor es indemnizado y el proveedor financiero se resguarda del riesgo de no devolución de los créditos otorgados para la producción.
Entre sus conclusiones, Benítez apuntó que existen lecciones aprendidas en este campo como el surgimiento de nuevos rubros y riesgos que demanda el mercado agropecuario, la expansión del producto a otra escala de unidades productivas y regiones del país, entre otros.