La inversión en el sector agrario sigue siendo una apuesta segura para lograr altos niveles de rentabilidad y generar una cadena de valor agregado para el mercado local, así lo explica Carsten Pfau, empresario alemán que ve en Paraguay un gran potencial por explorar.
Asentado hace más de 25 años en el país y confiado en la capacidad de desarrollo que propone el mercado paraguayo, Carsten Pfau recibió a Revista FOCO en su hogar para conversar sobre el Grupo AgriTerra con sede en Grasbrunn, Alemania, una de las compañías líderes en inversiones agrícolas en América Latina e impulsora de estrategias de inversión alternativa que cuenta con varias operaciones en Paraguay.
Al explorar los atractivos a nivel país y la capacidad de generar posibilidades para inversores internacionales, AgriTerra encontró en el nicho de la agricultura una fructífera fuente de oportunidades para realizar negocios. El accionista y director ejecutivo de la empresa, Carsten Pfau, explica que luego de realizar un estudio de mercado se percataron de que el sector de cítricos era un nicho poco atendido en el que se desaprovecha las bondades de la tierra y condiciones locales dando lugar al ingreso de productos importados.
Consciente de esta situación, el grupo decidió crear Citripar e invertir en la producción cítrica, con mayor énfasis en las naranjas. En este contexto, la empresa atrae inversiones extranjeras con la propuesta de venta de parcelas de plantación que gracias a la cosecha y comercialización de naranjas generan un alto nivel de rentas.
Un sector con mucho que ofrecer. “Paraguay es el mejor lugar para la producción de cítricos y no se aprovecha, lo que económicamente hablando no tiene sentido”, afirma Carsten. En este escenario explicó que las condiciones de suelo, clima y mano de obra capacitada son ideales para impulsar la producción de cítricos, así como también las condiciones de políticas fiscales, previsibilidad y la diferencia entre costo-producción siguen siendo atractivos para la inversión.
Para nuestro protagonista se trata de un nicho abordado con distintos enfoques, pero que no cubre toda la demanda, de allí que la producción de Citripar ha tenido muy buena aceptación. “La idea es cubrir la demanda de cítricos del mercado nacional, con calidad y precios competitivos frente a una alta tasa de importación”, indica. Esto atendiendo a que al tratarse de cosechas nacionales se ahorra en tiempo y costo de transporte, así como pagos por el cruce de fronteras.
A través de Citripar se cultivan 11 variedades de naranjas, de manera a aumentar la competitividad del producto y generar un ritmo de cosecha constante e ininterrumpida durante todo el año, de acuerdo a las características propias de cada variedad.
El cultivo se concentra en las zonas de La Colmena y Nueva Italia. En la Colmena disponen de 200 hectáreas completamente sembradas, donde producen 100.000 plantas de naranja. Por otra parte, en Nueva Italia disponen de 600 hectáreas en las que se llegará al total de 150.000 plantas, también se explotan limoneros, mandarinas e incluso hay invernaderos instalados.
En cuanto al volumen de producción, Carsten detalló que por cada mata de cítrico bien cuidado, se puede obtener de entre 150 y 200 kilos por año. Aunque estos resultados se obtienen en 7 a 8 años, según la etapa de vida de cada planta.
Con el objetivo de expandir el impacto de las actividades de la empresa, se proyecta el trabajo colaborativo con pequeños productores de la zona y lugares aledaños a fin de que estos se conviertan en proveedores. El proyecto contempla la posibilidad de brindar capacitación, acompañamiento e incluso financiación creando colectivos de productores, y así ampliar las oportunidades de comercialización sin salir de la zona.
Este sistema también será clave para el siguiente paso hacia la agroindustria que está dando la firma. El objetivo es generar concentrados de naranja para exportación, con el foco principal en el mercado asiático.
Más fortalecidos. La llegada del coronavirus trajo múltiples desafíos a nivel país, sin embargo para este sector no ha representado un cambio negativo de significación, sino al contrario. Carsten refirió que al tratarse de un producto natural, rico en vitamina C, la demanda por parte del consumidor subió. Asimismo, han logrado captar a más clientes inversores, quienes ante la incertidumbre del mercado mundial, buscaron una apuesta segura para su capital.
“El agro siempre funciona”, aseveró. Y destacó que es justamente por esa razón que el Paraguay podrá salir de esta crisis más fuerte que otros países, ya que gran parte de la economía se vincula con los agronegocios.
“Creo que quedó demostrado que la gente va a tener algo que comer y beber siempre gracias a la producción agraria”, agregó.
En lo referente a la estrategia que permite la consecución de los objetivos y llevar adelante sus empresas, el director indicó que esta reside en la fusión de la mentalidad europea, que piensa a largo plazo para una rentabilidad exitosa; o la mentalidad local más abocada en la inversión a corto plazo y los resultados rápidos. “Nutrirse de ambas visiones y compartir la experiencia del inversor europeo y el productor paraguayo nos ha permitido lograr muchas cosas”, indicó.
Políticas de impacto. En el marco de la responsabilidad social empresarial, el grupo cuenta con políticas que hicieron posible mantener cada uno de los puestos laborales y remuneraciones a su personal durante la cuarentena.
También impulsa la inclusión e igualdad de género y las oportunidades para los jóvenes dentro del plantel de colaboradores. Los mismos reciben capacitación constante, cuentan con posibilidades de escalar dentro de la compañía y ampliar su visión hacia la generación de productos con mayor valor agregado a través de la agroindustria.
A esto se le suma las condiciones socioambientales contempladas en la ley alemana para toda la administración.
Grupo Inversor
La apuesta de capital extranjero en el país los ha llevado a conseguir una importante participación en el sector ganadero, un fuerte posicionamiento en el mercado orgánico al invertir en la fabricación de jugos frescos, producción de frutas y verduras, así como una fuente de agua mineral. La apuesta por la diversificación también los condujo a reencontrarse con el mercado inmobiliario a través de Ecovita Country Club en Nueva Italia.
Algunas de las empresas operativas en el país son: Hortipar, Ecovita, Citripar, Citrus Basket Management Gmbh, Banta Ganadera, GranjaDirect SA, Alimentos Exportadora SA, Paraguay FRESH, Magno TV Producciones SA.