El Corredor Bioceánico registra un 51,87% de avance y está transformando a su paso el Chaco paraguayo, con una serie de oportunidades económicas y sociales. Fueron entregados 106 kilómetros de ruta asfaltada y señalizada, del total de 277 kilómetros con los que contará este primer tramo una vez entregado.
Los dos subtramos próximos a ser finalizados son el 5 en Loma Plata Boquerón, con una extensión de 14 kilómetros y el 16 en Carmelo Peralta Alto Paraguay, con 16 kilómetros.
El primero registra un avance del 69%, mientras se trabaja en las capas de suelo cal y cemento, base granular, terraplén y las dos capas asfálticas con las que cuenta la megacaretera. El segundo alcanzó el 51%, con las mismas fases citadas en el subtramo anterior.
Estos sectores aportarán a su vez  3 de los 13 pasafaunas con los que contará toda la carretera. Los mismos consisten en estructuras que permiten el paso de animales silvestres de un área boscosa a otra, de manera segura.
La ruta Bioceánica avanza hacia el centro del chaco paraguayo. Foto: Gentileza
El paquete estructural de la ruta cuenta con 76 centímetros de grosor y un terraplén de 1,30 metros en promedio. El ancho total de la carretera es de 12 metros, con banquinas de 2,5 metros a cada lado, siendo la calzada de 3,5 metros por carril.
A la par se trabaja en otros seis subtramos, los 6, 7 y 8 en Loma Plata y los 13, 14 y 15 en Carmelo Peralta. Estos varían en cuánto al desarrollo de los trabajos, entre el 2 y el 19%, pasando por el movimiento de suelo y el terraplén.
En todos los frentes, se cumple estrictamente el protocolo sanitario contra el Covid-19 que incluye el lavado de manos, uso de mascarilla y el distanciamiento en los comedores, así como en las unidades de transporte para el traslado de obreros.  Son unos 1.500 colaboradores en promedio.
Esta primera fase del megaproyecto del Gobierno Nacional se realiza mediante la modalidad «Llave en mano» y la inversión es de unos USD 445 millones.
Una vez culminado todo el trazado de la ruta desde Carmelo Peralta (frontera con Brasil) hasta la zona de Pozo Hondo (frontera con Argentina), unirá a los puertos marítimos más importantes tanto del océano Pacífico como del Atlántico y generará otros 2.500 empleos adicionales, así como un sinfín de oportunidades a los poblados del Chaco paraguayo.