Un plan de negocios es una hoja donde plasmas la visión que tienes para tu emprendimiento. También explicas cómo funciona cada una de sus áreas. Es como un mapa, que te indica hacia dónde vas y cuáles son los pasos más importantes a dar. Te brindamos 8 recomendaciones para que lo realices con éxito.
1. ¿Para qué sirve un plan de negocios?
Tu tiempo es limitado y necesitas aprovecharlo de la mejor manera. Imagina la sensación de tomar tus notas, sentarte al escritorio y saber perfecto a qué te debes enfocar para que tu negocio sea un éxito. En todo momento tienes bien claro lo que estás haciendo y eso te permite trabajar con calma. El plan de negocios te ayuda a concretar lo que traes en la cabeza. Te da claridad sobre lo que estás haciendo, te enfoca en lo importante y ayuda a resolver el agobio del que los emprendedores somos presos. Sirve para establecer metas y objetivos. Te impulsa a tomar acción.
2. ¿Cuáles son las partes que debes incluir en tu plan?
El propósito de tu plan es darte una guía para las acciones más importantes a realizar dentro de tu negocio. Necesitas algo fácil de entender que realmente puedas usar. Veamos los elementos que contiene: Propósito, propuesta, cliente, promoción, precio, siguientes 3 pasos que desarrollarás a futuro. Compra un bloc de notas adheribles Post-It. Usa una nota para escribir cada punto y pégala en el espacio correspondiente. De esta manera podrás fácilmente actualizar tu plan conforme tu negocio vaya evolucionando.
3. Visión
Una visión es un destino, un lugar al que quieres llegar. Enfoca tus acciones hacia la dirección adecuada. Las siguientes preguntas te ayudarán a definirla: ¿Cuál es tu sueño?, ¿cómo es el estilo de vida que deseas tener?, ¿de qué se trata tu negocio?, ¿qué tipo de actividades realizas? ¿con qué tipo de personas trabajas?, ¿cómo es tu manera de trabajar? Trata de ser muy descriptivo, agregando detalles vívidos.
4. Propósito
Piensa en un objetivo grande que hayas conseguido, por ejemplo: terminar la universidad, conseguir el empleo que tienes o criar a tus hijos. Ahora, trata de recordar ¿por qué querías conseguir eso?, ¿cuál fue el propósito de tanto esfuerzo? Tal vez buscabas una mejor calidad de vida, querías demostrarte a tí mismo que eras capaz o fue un acto de amor hacia las personas que más quieres en este mundo. Cualquiera que haya sido tu causa, era lo suficientemente fuerte para mantenerte motivada cuando las cosas no iban tan bien. Emprender es difícil. Siempre se enfrenta toda clase de obstáculos y contratiempos antes de ver tu sueño hecho realidad. Necesitas una razón lo suficientemente fuerte para querer triunfar con tu negocio, más allá de “Odio a mi jefe y quiero renunciar”
5. Propuesta
Un negocio se trata de encontrar un problema que muchas personas tengan y ofrecerles la solución a cambio de un pago. Mira estos ejemplos.

6. Clientes
Son los que pagan por tu súper solución y hacen que tu sueño de negocio se vuelva realidad. Sin ellos, no eres nadie. Necesitas encontrar un grupo de personas con características específicas para el cual tú y tu negocio son perfectos. Piensa en esto como si fuera una amistad. Hay personas con las que haces química instantánea y personas con las que prefieres mantener distancia.
Usa estas preguntas como guía para descubrir al que podría ser tu cliente ideal: Edad, género, ¿qué características tienen estas personas?, ¿cómo es su manera de pensar?, ¿qué hábitos tienen?, ¿qué les interesa?, ¿qué tipo de lugares frecuentan?, ¿por qué se interesarían en tu propuesta?, ¿por qué estarían dispuestos a pagarte? Si apenas comienzas tu negocio, puede que no conozcas todos los detalles. Anota lo que sepas. Conforme lleves tus ideas a la práctica, descubrirás nueva información.
7. Promoción
Tienes una propuesta de negocio y una idea sobre qué tipo de persona estaría dispuesta a pagar por ella. El siguiente paso es hacer que tus clientes ideales se enteren de que existes. Hacer promoción no se trata de dibujar un cartel, pegarlo en un poste y esperar que la gente corra hacia ti. Necesitas crear oportunidades para interactuar con tus clientes y demostrarles lo increíble que eres, por ejemplo: Llamarles por teléfono, enviar un correo y dar seguimiento una o dos semanas después, contactarlos por chat, contactarlos en persona, imprimir volantes y repartirlos en los lugares donde tus clientes se podrían encontrar, enviar un flyer con información sobre tu propuesta por Whatsapp, publicar tu propuesta en las diferentes redes sociales que manejas.
Selecciona una o dos técnicas que usarás y anótalas en tu plan.
8. Siguientes tres pasos a dar
Un plan no sirve de nada si se queda en el papel. Necesitas tomar y aplicar la información. Revisa tus notas y escoge tres pasos que puedes dar en este momento para acercarte a la visión inicial que planteaste. Debes poder completar los tres pasos en una semana. De esta manera, avanzarás hacia el proyecto de negocio que tienes, sin sentirte agobiada.
Por ejemplo. Supongamos que quieres iniciar tu propia marca de ropa. Empieza por clarificar tu propósito e investigar quiénes serían tus clientes ideales. La siguiente semana, puedes decidir el nombre de tu marca y la que sigue, diseñar un logotipo. Avanza lento pero seguro. Lo importante es que tomes acción constante. Ser súper productiva un día y dejar tu proyecto abandonado durante el resto del mes, no sirve de mucho.