Como cierre de las celebraciones en conmemoración del centenario de relaciones bilaterales entre Paraguay y Japón, se hizo un acto de inauguración del Monumento Conmemorativo por los 100 Años de Amistad, del escultor Javier Guggiari. Igualmente, se realizó la plantación de cien árboles de las especies de lapacho y cerezo, en el litoral del Palacio de Gobierno.
La actividad fue organizada por la Embajada del Japón y la Comisión Organizadora de los Eventos Conmemorativos de los 100 años de Amistad Paraguay-Japón. "Juntos al Sueño", el artista Javier Guggiari fue contratado por la organización para realizar el monumento que represente todos estos años de relacionamiento entre ambos países. Consta de 6 metros de altura y 3 metros de ancho. Según dijo Guggiari, para la realización del trabajo se inspiró en la presencia de la colectividad japonesa en el país y el trabajo realizado por los mismos y sus descendientes, brindando así una importante contribución para el desarrollo del campo en Paraguay.
“Los agricultores paraguayos los tenían como referencia, fue lo que me llevó a desarrollar una obra que signifique la dinámica del esfuerzo, consecuente avance y permanente progreso de los paraguayos. El Sol Naciente representa la fuerza y el empuje que los japoneses inyectaron al Paraguay, representado por la vela en ñanduti, que a su vez, abraza y envuelve a los japoneses”, explicó el reconocido escultor.
Más árboles en la Costanera. En cuanto a la plantación de árboles, se optaron por las especies que más simbolizan a ambos países; el lapacho a Paraguay y el cerezo a Japón (sakura), 50 unidades de cada una, sumando un total de 100 que embellecerán con sus colores la Costanera de Asunción. Esta acción final deja como mensaje la amistad entre dos pueblos, reflejado en dos árboles de diferentes variedades pero con similares características y de gran aceptación por la comunidad.
“Será un magnífico escenario para que todos puedan disfrutar de sus flores en la primavera. En Japón se realiza el festival del Hanami, una costumbre con el fin de admirar el florecimiento del cerezo. Durante esta festividad, los familiares y amigos, se reúnen en los parques con árboles de cerezos y bajo la sombra de los mismos a modo de picnic, comparten alimentos y disfrutan de buena compañía”, manifestó Cristina Tanaka, representante de la Comisión.
Respecto al procedimiento y cuidado de la plantación, Tanaka aclaró que fueron asesorados por el departamento de Gestiones Ambientales de la Municipalidad de Asunción e ingenieros agrónomos nikkei. “La naturaleza del suelo de la Costanera es caracterizada por ser arenosa, por eso se perforaron pozos de 50cm x 50cm aproximadamente y otros con hasta un metro de profundidad. Al cerezo se le confeccionó un cerco protector cubierto de media sombra para que pueda soportar el calor paraguayo”.
Desde la organización esperan la colaboración del personal a cargo de la Presidencia, la Municipalidad, la Franja costera y la ciudadanía en general para cuidar los plantines, ya que beneficiará a todos en algunos años con su sombra y hermosa vista.
Los lapachos fueron adquiridos mediante la colaboración de las empresas y marcas que apoyan las actividades del centenario, mientras que los plantines de cerezo fueron donación de la Asociación Japonesa de Yguazú.