La construcción del nuevo edificio de la Facultad de Filosofía y Ciencias Humanas de la Universidad Católica Nuestra Señora de la Asunción (UCA) abarcará una superficie de 6700 m2 y será ejecutado por la empresa Itasã SA dentro del predio del colegio La Providencia (Mcal. López y Fulgencio Yegros), colindante y perteneciente a la tradicional casa de estudios de nuestra capital.
La futura edificación fue diseñada por la arquitecta Mirna Zárate, directora de Planificación y Fiscalización de Obras y Mantenimiento de la UCA, sobre la base de la flexibilidad de los espacios, buscando armonizarlos con el entorno. El nuevo edificio estará dentro de La Providencia, predio considerado patrimonio arquitectónico del Centro Histórico de Asunción.
“Es una construcción muy delicada porque estamos trabajando sobre un edificio ya existente. Desarrollamos un sistema de construcción cuya estructura pasa sobre la casa existente. Es una forma de preservar ese sector y no intervenir en esa zona histórica”, explicó el arquitecto Aniano Orué.
El proyecto apunta a vincular las sedes de la UCA y el colegio La Providencia. La restauración de esta última también será emprendida por Itasã SA, de cara a preservar el histórico del centro educativo capitalino fundado en 1882. Por su parte, la Facultad de Filosofía y Ciencias Humanas, una de las primeras de la UCA, fue fundada en 1960.
La nueva obra. En este sentido, Itasã SA prevé trabajar en la construcción del nuevo edificio y la restauración del Colegio La Providencia en simultáneo y durante 14 meses.
El futuro complejo estudiantil constará de una planta baja destinada al área administrativa académica y seis pisos más de aulas. Cada nivel dispondrá de amplias galerías con baños sexados e inclusivos, mientras que el último será para usos múltiples.
Las galerías exhibirán grandes arcos, emulando los que aloja el emblemático colegio La Providencia, conservando así la visión arquitectónica.
La obra tendrá dos amplios niveles de estacionamiento, cuatro ascensores panorámicos, que brindarán una vista privilegiada de Asunción, dos escaleras presurizadas –cumpliendo cabalmente con las exigencias y normas de seguridad–, y un mirador hacia el río Paraguay.