El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) organiza su sexta cena empresarial solidaria, que se realizará el 19 de setiembre en el centro de eventos del Paseo La Galería. El objetivo de esta edición es promover más y mejores cuidados y servicios para la primera infancia.
La cena anual de UNICEF en Paraguay convoca a empresas interesadas en colaborar con los programas y proyectos de la organización en el país. La cena anual de UNICEF “Una noche, miles de sueños” apunta a mejorar el futuro invirtiendo en los primeros años de vida.
El objetivo de este año es congregar los aportes del sector privado para apoyar los programas que UNICEF promueve en el país para brindar atención a los niños y niñas en sus primeros años de vida, ya que desde el embarazo y hasta los 3 años existe una oportunidad decisiva y única de influir en el desarrollo de las personas. Durante este periodo de la vida las conexiones de las neuronas se forman a una velocidad que no volverá a repetirse y se sientan las bases que determinan su potencial a futuro.
UNICEF define 3 acciones claves en esta etapa de la vida: jugar, comer y amar. Jugar tiene que ver con la estimulación del bebé; comer, con la nutrición adecuada; y amar, con los cuidados afectuosos y el buen trato.
La organización promueve en el país acciones para fortalecer las capacidades de las familias y de los servicios en cuanto a la estimulación de los bebés y niños pequeños, incluyendo a aquellos con discapacidad, para que desarrollen su potencial intelectual, motriz, físico y afectivo. También realiza actividades de fomento de la lactancia materna, así como de prevención y protección contra la violencia hacia las niñas y niños.
Estimulación en Paraguay
En el país, 3 de cada 10 niñas y niños de 3 a 5 años asisten a programas educativos para la primera infancia. En sus casas, 6 de 10 niños y niñas de entre 3 y 5 años realizan habitualmente actividades con sus padres o adultos cercanos que les permiten estimular su aprendizaje, como conversar, cantar, jugar, leer cuentos, entre otras. Este número disminuye a 4 de cada 10 en los hogares más pobres.
Invertir en programas de atención a la primera infancia constituye una acción relevante para romper el círculo de la pobreza y contribuir a que los ciudadanos puedan desarrollar la plenitud de sus potencialidades físicas, emocionales e intelectuales.
Gracias al aporte de las empresas que participaron de la cena anual de UNICEF de 2018, desde el pasado mes de marzo las niñas, niños y adolescentes del Mercado de Abasto cuentan con el Centro de Atención Integral (CAI), que recibe a niños de 18 meses a 4 años, cuenta con un comedor para 100 niños y adolescentes, un dispensario médico y un espacio para programas de protección a niños que sufren violencia, trabajan o padecen adicción a drogas.