Cuando se conversa sobre el desempeño, es importante que el jefe se exprese con un lenguaje claro y firme que despierte la responsabilidad del colaborador para encontrar soluciones. El lenguaje puede actuar en contra si no es el adecuado. En otras palabras, muchas veces el jefe se expresa de manera que perjudica sus propios objetivos. Recomiendo utilizar las siguientes estrategias de conversación:
1. Hacer pedidos al colaborador en el modo singular
Cuando se hace un pedido a un colaborador se suele decir "¿Qué podemos hacer para solucionar…?" en el modo plural. Sin embargo, recomiendo decir "¿Qué podés hacer para…" en el modo singular.
De esa manera el pedido va claramente dirigido al colaborador que tiene que pensar qué va a hacer. Al usar la palabra "podemos hacer" el jefe se está involucrando y de esa manera aparenta ser "copropietario del problema", lo cual no ayuda que el colaborador se haga "dueño del problema", que piense por sí solo y calcule lo que puede hacer. Claro que el jefe es responsable de los errores del área, pero aquí estoy hablando de una estrategia de conversación que despierte la responsabilidad del colaborador.
Algunas personas piensan que para alentar el trabajo en equipo en el área, es bueno que el jefe se exprese en plural con palabras como "¿Qué podemos hacer…?". Es comprensible ese deseo, pero el trabajo en equipo puede ser atendido de muchas otras maneras. En la conversación de desempeño el objetivo es despertar la conciencia y responsabilidad del colaborador. La palabra "podemos hacer" saca poder al colaborador, no le hace sentir propietario del mal desempeño y por lo tanto propietario de la búsqueda de una solución.
El uso del plural en los pedidos confunde al interlocutor. El singular "te pido" por ejemplo denota un pedido expreso que pone en el otro la responsabilidad de la ejecución.
Otra expresión de ayuda es la pregunta "¿Qué soluciones sugerís para evitar que este error vuelva a suceder? Esta pregunta induce al colaborador a pensar que el o ella deben traer la solución, y no esperar que el jefe lo haga. La pregunta "¿Qué soluciones sugerís…?", también da la sensación que el jefe está empoderando al colaborador para que resuelva una situación.
Otra frase que transmite y transfiere responsabilidad al colaborador es: ¿"Que vas a hacer diferente de aquí en adelante…?" o "decime una o dos acciones que vas a hacer diferente para que en el futuro este error no vuelva a suceder". Estas preguntas confieren un sentido futuro que inducen a ambos a focalizar en soluciones futuras y no quedarse trancado en el pasado o el presente.
2. Usar expresiones "desde el ángulo del colaborador"
Es muy común que los jefes digan : "Yo necesito que vos…". Esto no es útil ya que parece que el colaborador únicamente debe hacer bien sus tareas "por el bien del jefe", cuando en realidad el colaborador debe hacer bien las cosas "por su propio bien". Mejor decir "Te conviene…", que excluye al jefe en la acción a ser ejecutada por el colaborador y traspasa la responsabilidad. La expresión "Yo necesito que vos…" saca autoridad al jefe y poder al colaborador.
En términos generales, recomiendo la estrategia de trabajar con el paradigma "el verdadero jefe es la tarea", que recuerda a todos que el verdadero foco de todo es la tarea.
En resumen, no se trata de juegos de palabras. El lenguaje es generativo y puede impulsar a la creación de acciones para resolver problemas.